La denominada CURP biométrica será indispensable para obtener la credencial para votar
El convenio también incluye congelar la iniciativa de crear la cédula de identidad
Miércoles 13 de enero de 2010, p. 10
La Secretaría de Gobernación y el Instituto Federal Electoral (IFE) alcanzaron un principio de acuerdo mediante el cual ambas instancias aseguraran sus fines: la autoridad electoral garantiza que no se emitirá ninguna cédula de identidad con fotografía, permaneciendo la credencial para votar como único instrumento de identificación, y el Ejecutivo federal obtendrá la denominada clave única de registro poblacional (CURP) biométrica.
En los hechos, la base de partida para la construcción de un acuerdo más amplio –que para algunos consejeros implica la participación del Congreso y la reforma a las legislaciones electoral y de población– apuntalaría la credencial de elector con los elementos de seguridad de la CURP biométrica, en tanto que se incorporaría como requisito para la nueva credencial de elector.
Este martes hubo una reunión de los nueve consejeros, en la que se presentó el estado que guardan las conversaciones con Gobernación, a partir de lo cual se acordó el respaldo unánime para que la credencial de elector sea el único instrumento de identidad oficial, lo cual es un consenso que ya se tiene con Gobernación
, sostuvo el consejero Virgilio Andrade.
–¿Esta posición del IFE está basada en el compromiso de Gobernación de no emitir ninguna identificación?
–Sí, es un compromiso inicial –dijo Andrade.
Lo que falta por trabajar y también es un consenso es qué tipo de información se agregará a la credencial para efectos de que haga las funciones de cédula de identidad conforme a las nuevas exigencias del gobierno, qué información sobre las personas tendría ese instrumento
, añadió.
En principio, según confiaron otros consejeros, Gobernación alcanzaría sus fines en la fusión de ambos proyectos a partir de que la nueva CURP biométrica implicaría que el ciudadano deberá obtener este documento con el cual el Ejecutivo construiría una base de datos de la población con el registro de las huellas dactilares y el registro del iris.
A partir de esta posibilidad que tendría Gobernación, el gobierno federal concretaría las disposiciones contenidas en la Ley General de Población, que la faculta a emitir un documento de identidad, aunque en este caso sin fotografía. En este contexto, ambas instancias contarían con bases de datos independientes, si bien Gobernación no tendría acceso al padrón electoral, pero el IFE sí tendría la información del registro gubernamental.
Al respecto, el consejero Arturo Sánchez dijo que lo que ha quedado muy claro es que no es necesaria la emisión de dos identificaciones, pues con uno es suficiente, partiendo de que cada instancia tendrá su base de datos.
Andrade explicó que entre otros aspectos a definir está el tipo de proceso de transición que se seguirá, porque ahora todos tenemos la credencial para votar, es nuestro documento de identidad pero para adecuarla a las nuevas exigencias del gobierno federal y a las nuevas pretensiones, será necesario determinar si es conveniente realizar una renovación masiva y finalmente cuánto va a costar
.
En esta lógica lo que se pretende es que no exista duplicidad de esfuerzos entre Gobernación y el IFE, salvaguardando la responsabilidad del instituto de emitir la credencial de elector.
De concretarse este esquema se despejaría el riesgo de una desactualización del padrón electoral.
Este miércoles se presentará en la Comisión Permanente del Congreso un punto de acuerdo del diputado del Partido Verde, Pablo Escudero –hombre cercano al líder de los senadores priístas, Manlio Fabio Beltrones– en el que se cuestiona la marginación que ha tenido el Congreso en el debate sobre la cédula de identidad.