A casi 10 meses de que fue puesto en marcha el programa Pasajero Seguro de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), el cual suponía que sus elementos viajarían armados y en parejas a bordo de camiones y microbuses, sobre todo en horas pico, es prácticamente inexistente, denunciaron pasajeros y choferes.

En la base de microbuses de Chapultepec, por ejemplo, donde el titular de la SSP-DF, Manuel Mondragón y Kalb, dio el banderazo de salida de este dispositivo, Sergio Hernández, despachador del lugar, comentó: “ni siquiera se dan cuenta de que aquí mismo hay robos, ¿usted cree que se van a subir a los micros?”

Las parejas de policías, señaló, sólo estuvieron aquí cuando vino el secretario, el 24 de marzo del año pasado, fecha en que se dio a conocer que mil 524 uniformados vigilarían permanente y aleatoriamente los vehículos para garantizar la seguridad de los pasajeros.

Situación similar ocurre en las terminales de Indios Verdes, Observatorio, Pantitlán y Taxqueña, donde pasajeros entrevistados ni siquiera sabían que alguna vez se aplicó dicho programa.

Según información divulgada por la oficina de Comunicación Social de la policía, las delegaciones donde más se cometieron ilícitos en estos transportes fueron Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Venustiano Carranza y Azcapotzalco. Las armas que regularmente usaron los ladrones fueron navajas, armas de fuego tipo escuadra y réplicas, así como pistolas hechizas en forma de bolígrafo.

En la mayoría de las detenciones reportadas por la SSP-DF durante 2009, los pasajeros, en un descuido del ladrón, fueron quienes dieron aviso a las autoridades sobre el ilícito o intentaron hacer justicia por su propia mano, mientras que en los casos en los que había un policía a bordo de la unidad, éstos iban vestidos de civil fuera de su horario laboral o pertenecían a la Agencia de Seguridad del estado de México.

Ante esta situación y en un segundo intento por contener estos ilícitos, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal iniciará operativos encubiertos a bordo de los microbuses, informó el titular de la dependencia, Miguel Ángel Mancera, quien precisó que se estudia cuáles son las rutas más afectadas.

En entrevista, el funcionario consideró que aunque la situación no es alarmante, sí es uno de los puntos en los que la procuraduría tendrá mayor cuidado, pues se trata de un de los delitos de alto impacto e incluso, agregó, se buscará trabajar en colaboración con las autoridades del estado de México, pues muchos de estos asaltos se dan en rutas que tienen como destino la entidad vecina.

Lo que tendríamos que ver es exactamente las rutas que pudieran haber sido más afectadas y dependiendo de eso puede tocar una o dos delegaciones explicó el procurador Mancera.

Según cifras de la PGJDF, las denuncias por robo a bordo de microbuses se incrementaron 47 por ciento de enero a noviembre de 2009, cuando se levantaron 2 mil 383 quejas, con respecto al mismo periodo de 2008, que registró mil 616.

Además, del 1^O al 10 de enero de este año se han denunciado cien asaltos en el transporte público, de los cuales poco menos de la mitad, 48, se cometieron en microbuses, 27 en el Sistema de Transporte Colectivo Metro y 25 en taxis.