Buenos Aires, 9 de enero. El gobierno presentó ante la justicia una apelación ante los fallos de la jueza María José Sarmiento, quien en menos de 24 horas produjo ayer dos resoluciones, una contra la instalación del Fondo del Bicentenario, y otra reponiendo en su cargo al presidente del Banco Central, Martín Redrado, destituido por decreto presidencial, mientras se endurece la ofensiva de la derecha local, en diversas acciones que el ex presidente Néstor Kirchner calificó hoy como una conspiración permanente.

La figura de la conspiración se agigantó después que la jueza Sarmiento evitó recibir la apelación del gobierno, a pesar de corresponderle por la feria judicial por lo que los abogados del ejecutivo tuvieron que recurrir a la Cámara que habilitó la presentación.

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández relató que la magistrada les había informado que el plazo para presentar las apelaciones a los fallos emitidos vencía mañana( por hoy) y cuando fuimos estaba el tribunal cerrado, se negó a recibirlos en su casa y dijo que debíamos esperar hasta el lunes, pero para ese entonces los plazos de apelación habrían vencido, explicó..

Algunos analistas vincularon estas actitudes de Sarmiento, con su vínculo familiar con altos jefes militares de la dictadura pasada. Hay quienes sugieren una revancha en momentos en que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció la desclasificación de los archivos sobre lo actuado por las Fuerzas Armadas durante la pasada dictadura (1976-1983) y cuando el ministro de economía, Amado Boudou, decidió medidas antimonopólicas y elevadas multas a compañías extranjeras.

No sólo la derecha se activó.

El diputado Fernando Pino Solanas, del centroizquierdista Proyecto Sur, quien recientemente negoció con todo el arco derechista los temas de bloques en el Congreso para enfrentar al gobierno, presentó una denuncia penal contra la mandataria por presunto abuso de autoridad y administración fraudulenta de bienes públicos en este caso para utilizar fondos del Banco Central para pago de deuda,

Esto causó una ”agradable sorpresa” a la dirigencia derechista, como señaló un medio local y también la crítica de otros sectores de izquierda por la actitud del cineasta en estas especiales circunstancias.

El ex presidente Kirchner, actual diputado nacional defendió la creación del Fondo del Bicentenario y acusó al grupo Clarín y al vicepresidente, Julio Cobos, de conspirar contra el proyecto de la Presidenta

Hablando en la localidad bonaerense de Santa Teresita, Kirchner sostuvo que esta conspiración “está encabezada por el multimedio Clarín, con Héctor Magnetto (máximo directivo) al frente, al que acusó de estar utilizando la “estructura mediática que obtuvo a través del tiempo y de la debilidad de la dirigencia para hacerle un daño grandísimo a la Argentina" y mentir a la población.

También vinculó al vicepresidente Cobos, como otro de los ejes de la conspiración. "Nunca vi en la historia de la democracia que alguien sea vicepresidente del gobierno y a la vez candidato a presidente del partido opositor”, señaló.

Cobos de alejó de la Unión Cívica radical (UCR) y llegó a la vicepresidencia en 2007 aliándose con los Kirchner, pero traicionó esta alianza a mediados de 2008, en un duro escenario golpista alentado por la dirigencia de cuatro entidades rurales, cuando votó en contra del incremento impositivo a los exportadores de soya y pasó a la oposición dura, sin renunciar a su cargo.

Kirchner criticó también a la UCR por continuar jugando con las instituciones de esta forma “cuando es visible que el vicepresidente quiere ejercer funciones que no tiene".

Recordó asimismo que Redrado –otro de los ejes conspirativos según dijo- había apoyado todas las medidas del gobierno como presidente del BC, incluyendo la decisión de cancelar la deuda con el Fondo Monetario Internacional en 2005.

“Redrado apoyó todo eso y lo digo para que vean cómo funciona la operación conspirativa en la Argentina", explicó.

Aunque Cobos convocó para el lunes a la Comisión de Labor Parlamentaria el jefe de la bancada kirchnerista Miguel Angel Pichetto, advirtió que el vicepresidente carece de toda facultad para convocar a una reunión de este tipo mientras el Senado está en receso. Anticipó que el bloque oficialista no participará.

De esta manera la situación ha tomado un sesgo peligroso y hay quienes quieren llevar a juicio a la presidenta, como la dirigente de la Coalción Cívica, Elisa Carrió, quien hoy curiosamente llamó a la serenidad al gobierno y la oposición.

La Banca local y diversos sectores empresariales entienden que esto no beneficia al país y tampoco a ellos, en momentos en que se preanunciaba una buena marcha de la economía que los favorece.