México puede reducir en 30 por ciento sus emisiones para el año 2020 sin necesidad de que esto sea condicionado a la transferencia de tecnología y al financiamiento de países ricos, señaló el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda).

En un comunicado explicó que el país tiene áreas que le permiten avanzar en esa meta sin tener que depender de recursos del extranjero, ya que instituciones como el Centro Mario Molina y el Banco Mundial han señalado que estas medidas se pueden aplicar a bajo costo.

Un ejemplo es el establecimiento de un sistema de autobuses confinados, tipo Metrobús; programas de eficiencia energética; controles de iluminación en edificios nuevos y establecer una norma oficial mexicana de eficiencia de motores en automóviles ligeros, entre otros.

También, agregó, hay medidas como la promoción de energías renovables, principalmente solar, eólica y geotérmica; así como el fortalecimiento y desarrollo de comunidades forestales sustentables para evitar la deforestación.

Agregó que es posible fortalecer programas de sustitución de aparatos electrodomésticos por equipos de bajo consumo de energía, como refrigeradores; así como producir y distribuir Diesel con bajo contenido de azufre para reconvertir la flota vehicular de gasolina.

El Cemda indicó que en el contexto de la cumbre de Copenhague solicitará a la delegación mexicana especificar qué proporción del 30 por ciento anunciado por el presidente Felipe Calderón podrá alcanzarse con recursos propios.