Universidades públicas estatales, con apoyo solidario, interculturales, tecnológicas y normales enfrentarán un recorte de al menos 6 mil millones de pesos en fondos y programas destinados a fortalecer la calidad educativa, ampliación de matrícula, saneamiento financiero, pensiones, reconocimiento de plantilla e infraestructura, de acuerdo con un análisis del proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2010 elaborado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES).

De aprobarse sin modificaciones el proyecto presupuestal, tan sólo los fondos asignados en distintos rubros para universidades públicas estatales (Upes) y con apoyo solidario (Upeas), tendrán una disminución real de 41.5 por ciento respecto de 2009, al pasar de 11 mil 778 millones de pesos a 7 mil 225 millones para el año próximo.

En el documento, presentado ante el consejo nacional del organismo en septiembre pasado, se destaca que la inversión federal en educación superior y posgrado como porcentaje del gasto en educación disminuyó de 16.3 a 15.9 por ciento, mientras que el promedio de recursos federales por alumno cayó de 45 mil 611 a 40 mil 907 pesos.

También advierte de un recorte en el llamado modelo de asignación adicional al subsidio federal ordinario –distribuido a universidades con mejor calidad educativa– que pasa de mil 300 a 500 millones de pesos, mientras el fondo de apoyo para reformas estructurales, que incluye pensiones, se reduce de mil 200 a 500 millones de pesos.

Señala que, si bien el fondo para la ampliación de la oferta educativa en el nivel superior aumenta de 600 a mil 650 millones de pesos, para el año próximo no se consideran recursos para rubros existentes, como el aumento de matrícula en Upeas y ampliación de oferta en institutos tecnológicos, que en 2009 contaron con mil 500 millones de pesos.

Los fondos de consolidación y apoyo para el saneamiento financiero de Upes por debajo de la media nacional en subsidio por alumno –entre las que se encuentran las instituciones con menores recursos en gasto por estudiante– también se reducen en mil millones de pesos, respectivamente, mientras que 600 millones de pesos destinados en 2009 al reconocimiento de plantilla universitaria desaparecen, así como 350 millones para el programa de carrera docente.

Las instituciones de educación superior tecnológicas también se ven afectadas, pues se eliminan recursos destinados para apoyo a la calidad por 550 millones de pesos, mientras que las universidades interculturales sufren una reducción de 150 millones de pesos en programas para infraestructura y consolidación, que incluye equipamiento.

En el caso de las normales públicas, los programas y fondos destinados al mejoramiento institucional y fortalecimiento a la calidad, caen de 619 millones aprobados este año, a 348 millones propuestos para 2010, lo que representa una reducción real de 40.7 por ciento.

También se eliminan recursos para apoyo a la formación profesional, entre ellos, el proyecto de Fundación Educación Superior-Empresa y el Sistema Nacional de Educación a Distancia, coordinados por ANUIES, por 170 millones de pesos, mientras que los fondos para el Programa Nacional de Becas para la Educación Superior se congelan en mil 400 millones de pesos, pero al aplicar el impacto de la inflación, representa una caída de 4.6 por ciento.