Del pasado 12 de marzo al 28 de septiembre reporta 31 mil 594 contagios; 231 murieron
Rechaza la dependencia rumor de que sea insegura la vacuna contra el nuevo virus
Esta semana empezará la aplicación de 20 millones de dosis contra la influenza estacional, dice Hernández Ávila
Miércoles 30 de septiembre de 2009, p. 35
En abril pasado –durante la primera ola de influenza A/H1N1– , el mayor número de casos se registró el día 27, con 410 personas que empezaron con los síntomas de la enfermedad, y en este mes, en el día 7 la cifra fue de 559 afectados.
Debido al tiempo que tardan las pruebas de laboratorio para confirmar la presencia del nuevo virus, los números siguen acumulándose en los primeros días del mes. Desde el 12 de marzo y hasta el pasado lunes hubo 31 mil 594 contagios a escala nacional, de los que 231 murieron, indica el reporte de la Secretaría de Salud (Ssa) difundido ayer.
A su vez, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Mauricio Hernández Ávila, informó que alrededor de 800 personas que padecen la nueva gripe se encuentran hospitalizadas en el país, y de ellas, 10 por ciento están graves.
Rechazó el rumor de que la vacuna contra el virus A/H1N1 sea insegura, pues dijo que se trata de un compuesto extraordinariamente bien diseñado
, que cumple todos los requisitos establecidos para obtener su licencia y cuya elaboración ha estado bajo estricta vigilancia.
Informó que en la primera semana de octubre empezará la aplicación de 20 millones de dosis en contra de la influenza estacional y a finales de mes se preve comenzar la inmunización contra la cepa A/H1N1.
Al antígeno –insistió– se dará primero al personal de salud –para mantener en un nivel muy bajo el ausentismo en los hospitales– y a las embarazadas. A medida que se reciban más vacunas se extenderá su aplicación al resto de la población en riesgo, principalmente personas con enfermedades crónicas, como cáncer, asma y diabetes. Otro grupo considerado son los niños, indicó el funcionario.
A la baja, el tercer pico
Entrevistado luego de la inauguración de la décimoprimera reunión del grupo de expertos en reducción de la demanda de enervantes de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas, Hernández Ávila aseguró que el tercer pico de la influenza tipo A/H1N1 va a la baja, aunque las estadísticas oficiales dan cuenta de lo contrario.
De acuerdo con gráficas elaboradas en la Ssa, que muestran tendencias de la pandemia en el país, en la zona centro la transmisión de la nueva cepa se reactivó en los últimos días de agosto y los primeros de septiembre, pero con mayor número de afectados, incluso por encima de quienes la contrajeron durante el brote en los estados del sureste.
Entre junio y julio, el pico
de ese que fue el segundo brote de la infección ocurrió el 28 de junio, con el mayor número de personas (375) que presentaron los síntomas de influenza A/H1N1.
La nueva ola
de transmisión se observó claramente a partir de la última semana de agosto, con más de 200 personas que a diario empezaron a tener las manifestaciones de la gripe. En los primeros días de septiembre la cifra rebasó los 300 afectados diarios, el día 6 subió a 477 y veinticuatro horas después el registro fue de 559 portadores del nuevo virus. En los días posteriores parece que la curva nuevamente empieza a bajar, pero todavía no son resultados definitivos, pues se seguirán acumulando datos de las pruebas clínicas acerca de la presencia de la cepa A/H1N1.
Por separado, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Daniel Karam Toumeh, dijo que el organismo está preparado para enfrentar un brote de influenza cuatro veces mayor del que se dio entre abril y mayo.
Señaló que ya existen signos inequívocos
de que el país se encuentra ante un nuevo brote de la enfermedad, por lo que recomendó a la ciudadanía asistir a las unidades médicas ante los primeros síntomas del padecimiento.
Durante la sesión ordinaria del consejo directivo de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Karam indicó que en las entidades donde existe mayor incidencia de casos, las clínicas y hospitales permanecerán abiertos incluso los fines de semana para atender tanto a derechohabientes como a ciudadanos no registrados en el IMSS.
“Prácticamente estamos preparados para este nuevo rebrote. En términos de antivirales, por ejemplo, el instituto cuenta con una cantidad cuatro veces mayor a la empleada durante abril y mayo, además de otras medicinas necesarias para el tratamiento, dijo.