La Confederación Nacional Campesina (CNC) advirtió que el país se encuentra al borde de una crisis alimentaria histórica debido a la prolongada sequía de este año, y agregó que la escasez de agua ha comenzado a generar pugnas sociales.

La disponibilidad del recurso está en riesgo por el cambio climático, los graves problemas de contaminación en 80 por ciento de las 300 cuencas hidrológicas y la imparable deforestación, puntualizó.

Ante dicha situación, propuso darle autonomía presupuestal y de decisión a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), sin que ello signifique dar luz verde para la privatización del recurso natural. Los gobiernos son los responsables de la justa distribución del líquido, por ello es absurdo que un litro de agua se venda mucho más caro que uno de gasolina, criticó el dirigente de la CNC, Cruz López Aguilar.

Convocó a las autoridades a actuar de inmediato, pues los problemas de falta de agua se agudizarán a causa del crecimiento demográfico, la sobrexplotación de los acuíferos, por el uso inadecuado para las tareas agrícolas, fugas en redes de distribución, falta de tratamiento y mal uso por la población.

La producción del ciclo primavera-verano será raquítica; los cultivos de maíz, frijol y cebada son de los más afectados.

Cincuenta por ciento de la producción nacional de maíz blanco se siembra en el actual ciclo agrícola, pero apenas se alcanzó la mitad de la meta; el frijol, que según la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación alcanzará un millón 200 mil toneladas, 300 mil arriba del consumo nacional, no llegará ni a 20 por ciento, porque se perdieron miles de hectáreas en San Luís Potosí, Durango y Chihuahua, pero las autoridades respectivas no quieren darse cuenta de la situación.