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Se vive una era atípica en la vida interna del partido, asegura

Critica Manuel Espino imposición de candidatos en dos delegaciones

Provocaron desánimo en las campañas en B. Juárez y M. Hidalgo, dice

 
Periódico La Jornada
Lunes 22 de junio de 2009, p. 43

El ex dirigente nacional del Partido Acción Nacional (PAN) Manuel Espino Barrientos aseveró que el desánimo en las campañas en Benito Juárez y Miguel Hidalgo se debe a errores que se cometieron desde la cúpula panista, donde se dio un receso de autoritarismo.

El presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) señaló que en la elección interna el PAN cometió varios errores, como designar candidatos sin tomar en cuenta la opinión de la militancia o de la sociedad, y eso ha generado desaliento dentro y fuera del partido.

Respecto de la imposición de candidatos –como acusa la militancia panista y entre los que destacan Lía Limón, aspirante a diputada local, y César Nava, a diputado federal– expresó: estamos viviendo una etapa atípica en la vida democrática del partido, como que nos dimos un receso de autoritarismo.

En ese tenor, abundó: como que dejamos de practicar la democracia y centralizamos las decisiones, se impusieron candidatos, se fue a contracorriente de muchos militantes, incluso de muchas dirigencias en los estados y ciudades, ésa es una experiencia autoritaria que nunca habíamos tenido en Acción Nacional.

En entrevista señaló que él mismo cuestionó la elección; sin embargo, pidió a la militancia redoblar esfuerzos, pues ésos son ahora los candidatos de las demarcaciones donde el PAN es gobierno.

Dijo que el PAN lleva años en la ciudad de México como un partido que no está totalmente aliado a la sociedad; con alto grado de distanciamiento de las comunidades sociales más representativas del Distrito Federal.

Y advirtó que las prácticas autoritarias no se van a volver a repetir. Yo mismo, después del 5 de julio, estaré alentando a los panistas para que nos involucremos en un debate, en una deliberación nacional para definir si queremos evolucionar hacia un partido de Estado, ser un instrumento del poder o de los ciudadanos.

Aclaró que ese proyecto nada tiene que ver con la ODCA, pues se trata “de un movimiento nacional que hemos venido preparando –para empujar al PAN a su cauce original días antes de la elección– unas 170 personas que nos representan en los diversos estados de la República” con este propósito, concluyó.