Andrés Manuel López Obrador interpondrá este lunes una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para denunciar la impunidad que prevalece en Oaxaca ante el homicidio de Beatriz López Leyva, quien era representante del gobierno legítimo en aquella entidad.

La queja será firmada también por Rosario Ibarra, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado. En tanto, el ombudsman nacional, José Luis Soberanes, informó que el organismo a su cargo empezó una investigación de oficio por el asesinato, para lo que envió a Oaxaca a dos visitadores.

La activista oaxaqueña, quien colaboraba con los senadores Salomón Jara y Gabino Cué para la construcción de redes de apoyo al presidente legítimo de México, fue ultimada a mansalva el pasado 6 de abril cuando se hallaba trabajando en el patio de su casa. Fue líder perredista en su pueblo, San Pedro Jicayán, ubicado en la costa oaxaqueña. En 2005 ya había sufrido un atentado, del que responsabilizó a caciques priístas de la región.

En reunión privada con Soberanes, López Obrador expuso en principio su desacuerdo por la actuación de la CNDH en la investigación y dictamen del caso de la indígena Ernestina Ascencio.

No estoy de acuerdo con la actuación de la CNDH en el caso de la indígena de la sierra de Zongolica porque (el dictamen) pareció contubernio con las autoridedes de Veracruz y con el usurpador Felipe Calderón, dijo el tabasqueño en entrevista realizada de manera conjunta con Soberanes.

Sin embargo, enseguida aseveró que la CNDH es la única institución a la que se puede acudir para analizar el caso de López Leyva, porque en Oaxaca reina la impunidad y sus autoridades están vinculadas a hechos delictivos.

Al respecto, Soberanes dijo que actualmente la CNDH atraviesa por una situación difícil, porque el gobierno federal ha rechazado sus recomendaciones recientes, en particular la que se refiere a la responsabilidad de la administración calderonista en la desaparición de dos integrantes del Ejército Popular Revolucionario (EPR). Lamentó también la negativa de la PGR –dijo– para entregar a este organismo información.

López Obrador señaló que López Leyva “fue una mujer buena, extraordinaria, de ahí que es necesario realizar las gestiones necesarias para que se investiguen los hechos y se castigue a los responsables.

“Desgraciadamente –advirtió–, en Oaxaca reina la impunidad; ha habido muchos asesinatos, pero no se aclara nada ni se castiga a nadie. Ya basta. Es necesario que se ponga un hasta aquí a esta situación.

Los del gobierno usurpador se atienen a que tienen el control de la mayoría de los medios de comunicación. No olvidemos que el origen de esto fue el fraude electoral de 2006, con el compromiso del PRI de apoyar la imposición de Calderón a cambio de que se protegiera a los gobernadores de Oaxaca, Ulises Ruiz, y de Puebla, Mario Marín, además de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación también están al servicio de la mafia política y económica del país.

El ex candidato presidencial señaló que seguirá convocando a la gente a defender las garantías ciudadanas y hacer valer las libertades y los derechos humanos para que haya un verdadero estado de derecho, no un Estado chueco, y mucho menos un Estado oligárquico.

–¿Considera que la CNDH es un organismo confiable?

–Por eso estoy aquí, porque no tenemos a dónde acudir. Desgraciadamente, no hay otras instituciones. Con todas sus deficiencias, es ésta la única instancia que hay, el único organismo para hacer valer los derechos humanos.