Pachuca, Hgo., 11 de abril. En un duelo de poder a poder y con gran reacción en el segundo tiempo, Pachuca derrotó 3-1 al campeón Toluca, y le quitó lo invicto y el superliderato del Clausura 2009.

Los rojos dominaron el primer tiempo, pero los Tuzos tuvieron bravía reacción y llegaron a 27 puntos, mientras Toluca, que sumó 12 partidos sin derrota, sufrió su primera caída y se quedó con 26 unidades. Lo único positivo para los Diablos fue que Héctor Mancilla llegó a nueve tantos y empató en el liderato de artilleros a Christian Giménez, quien no anotó, pero brindó un gran juego.

Los Tuzos quisieron hacer valer su localía y desde el inicio se lanzaron al frente, pero se toparon con pared, ya que los Diablos se replegaron en su área y no sólo cerraron espacios, sino se mostraron muy peligrosos al contragolpe.

Y empezaron a dar aviso al minuto 7, cuando Mancilla se plantó solo ante Miguel Calero, pero el arquero rechazó el disparo. Dos minutos después fue Sinha el que desperdició una oportunidad de gol.

Calero se siguió empleando a fondo y salvó a su escuadra, al minuto 16, al desviar en gran lance un tiro potente de Israel López. Pero el colombiano nada pudo hacer un minuto después, cuando Mancilla abrió el marcador tras un pase de Carlos Esquivel, luego de una serie de rechaces en el área local.

Pachuca se acercó a la meta roja hasta la media hora de juego, por conducto del Chaco Giménez y Damián Álvarez, pero sin crear situaciones claras de peligro.

Lo mejor que hizo el equipo de Enrique Meza fue al 45, en remate de Blas Pérez dentro del área que Cristante rechazó con el pie, al mostrar reflejos felinos.

Pachuca salió con ritmo revolucionado al complemento y puso a trabajar horas extra a la zaga visitante. Al minuto 49, Paulo da Silva rechazó casi sobre la línea de gol ante el acoso del panameño Pérez y, al 52, Cristante mandó a tiro de esquina un potente disparo de La Chilindrina Álvarez. Entonces Cristante realizó una mala salida y permitió dentro del área chica el cabezazo de Paul Aguilar, para el 1-1.

Los Tuzos aprovecharon el momento y remontaron, al minuto 58, en un tiro-centro de Álvarez que superó a Cristante y Blas Pérez se elevó dentro del área para lograr el 2-1.

Heridos, los Diablos se lanzaron al ataque, pero Mancilla falló dos claras ocasiones de gol y luego Édgar Dueñas mandó un tiro de media distancia cerca del poste izquierdo.

El mediocampista Gabriel Caballero dio la puntilla, al aprovechar un mal despeje de Cristante y su disparo pasó entre las piernas de Miguel Almazán y Da Silva para un categórico 3-1, que dio pie a la fiesta total en el atiborrado estadio Hidalgo.