Madrid, 11 de abril. La escritora Corín Tellado, la reina de la novela romántica, falleció este sábado, días antes de cumplir 82 años.

Si bien alguna vez la autora lamentó la falta de reconocimiento del medio literario, de acuerdo con la radio española es la escritora más leída en lengua castellana después de Miguel de Cervantes, con una trayectoria de más de seis décadas en las que vendió 400 millones de ejemplares en todo el mundo.

El deceso ocurrió en Gijón, Asturias, al norte de España. De acuerdo con la prensa de ese país, la escritora falleció en su domicilio después de que sufrió una caída; aunque primeras versiones señalaron que el deceso ocurrió en el hospital Cabueñes, donde se encontraba internada.

Hasta el cierre de esta edición no se habían precisado las causas de la muerte, aunque cabe recordar que padecía una enfermedad renal crónica desde hace años. Su funeral, de acuerdo con medios locales, tendrá lugar la tarde del lunes, en la catedral de la parroquia de la Inmaculada, ubicada en esa misma ciudad.

Apenas el pasado miércoles acababa de terminar otra novela que su nuera se había encargado de tipografiar, mientras escuchaba el dictado de la escritora.

Después de Cervantes, la más leída en lengua española

Nacida el 25 de abril de 1927, su verdadero nombre era María del Socorro Tellado López, quien fue la única mujer de los cinco hijos procreados por un maquinista mercante y una ama de casa.

A lo largo de su extensa carrera de 63 años publicó más de 4 mil títulos y vendió 400 millones de ejemplares de sus obras, por lo que entró en la edición local del libro de Récord Guiness como la más vendida en lengua española. Incluso Radio Nacional de España la ubica como la escritora más leída en nuestro idioma después del autor de El Quijote.

Aunque su trabajo fue visto siempre por el medio literario con cierto recelo, por considerar que las suyas eran sólo novelitas románticas, algo que no se le puede negar es su condición de fenómeno sociológico, más allá de los diferentes momentos históricos, culturas y modas que han atravesado sus numerosos lectores.

El interés de la autora por la literatura comenzó en edad escolar; era una lectora compulsiva, y fue a los 18 años cuando escribió su primera novela, Atrevida apuesta, impulsada por las penurias económicas que trajo consigo la muerte de su padre, apenas un año antes.

Fue una historia de marinos, todos en mi familia lo eran. Posiblemente sí fuera una atrevida apuesta (...) Tal como la pensé la escribí, declaró Corín Tellado respecto de ese primer libro, en una entrevista sin fecha publicada en su sitio de Internet.

Sus historias tratan de amor y desamor, en las que destacan como personajes mujeres de hoy que viven historias románticas, pasiones, aventuras eróticas, matrimonios rotos y que luchan por su felicidad.

Ayudó a sobrellevar la Guerra Civil

Algunas de esas obras llegaron a ser adaptadas al cine, como Tengo que abandonarte (1970), así como para la televisión en España y América Latina, además de que se encargó de escribir radionovelas.

El mundo romántico de Corín Tellado ayudó a muchos de sus compatriotas a sobrellevar los duros años de la penuria vividos tras la Guerra Civil española (1936-1939). Su éxito fue tan fulminante que en 1951 la revista cubana Vanidades le ofreció un contrato para escribir dos novelas cortas al mes.

Ni soy romántica ni escribo novelas románticas. Soy positiva y sensible, y escribo novelas de sentimientos, que no es lo mismo, aseguraba en 2003 esta mujer, quien supo lidiar con el franquismo, régimen que le censuró cuatro libros en un solo mes.

En alguna ocasión, la autora reconoció haber escrito, bajo los seudónimos de Ada Miller Leswy y Ada Miller, a finales de los años 70 –la época del destape en España–, 26 novelas eróticas sin dificultad porque, según contaba, carecían de sentimientos.

Siempre negó ser o considerarse feminista, cuando se le preguntaba al respecto decía: Considero que los hombres tienen su lugar y las mujeres el suyo. A partir de ahí, cada cual llegará a donde merezca, afirmaba.

Creo que nos parecemos bastante. Las mujeres paren y los hombres mean contra la pared, eso es todo. Yo hago hombres estupendos, sensibles.

Corín Tellado contrajo matrimonio en 1959 con Domingo Egusquizaga, con quien tuvo dos hijos, Begoña y Domingo. Sin embargo, tres años después se separó, lo que demostró que al igual que sus heroínas ella también era una mujer decidida e independiente, algo poco habitual en la sociedad de aquella época, en la que, por ejemplo, las mujeres necesitaban permiso del marido para abrir una cuenta bancaria.