Buenos Aires, 1º de abril. Miles de argentinos acudieron hoy al Congreso para rendir tributo y despedir los restos del ex presidente Raúl Alfonsín (1983-1989), emblema del retorno a la democracia tras el fin de las dictaduras militares, quien murió la noche del martes a los 82 años afectado de cáncer pulmonar.

Una multitud formó ordenadas filas para tener acceso a la capilla ardiente instalada en el Salón Azul del Palacio Legislativo, al permitirse que los restos sean velados por la ciudadanía, mientras el gobierno dispuso tres días de duelo en homenaje al líder histórico de la Unión Cívica Radical, uno de los más respetados personajes de la escena política del país.

Todo el espectro político argentino expresó su pesar por la muerte de Alfonsín; la presidenta argentina, Cristina Fernández, no podrá asistir a los funerales pues se encuentra en Londres para participar en la cumbre del Grupo de los 20, pero decidió adelantar su regreso al país para acompañar a la familia del ex mandatario.

En sus condolencias, la mandataria lo recordó como un hombre de fuertes convicciones y siempre como la figura indisolublemente vinculada a la recuperación democrática de Argentina.

Numerosos líderes y gobiernos del mundo enviaron sus condolencias al pueblo y gobierno de Argentina, especialmente la mayoría de los países de América Latina y Europa, además de Estados Unidos. También organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos y la Secretaría General Iberoamericana.