Manuel Espino aclaró que no tiene un solo elemento para suponer o afirmar que el PRI está vinculado al crimen organizado, y sugirió que si alguien tiene pruebas de ello, haría bien en presentarlas.

De esta forma, el ex líder panista criticó la estrategia utilizada por su partido (actualmente encabezado por Germán Martínez) para acusar a sus opositores por la falta de voluntad política para aprobar las reformas pendientes en materia de seguridad y justicia, de ahí que, lamentó, se lancen afirmaciones sin fundamento.

No comparto la forma rijosa de hacer política. Soy un político que me considero duro, pero no bandolero. Hasta en el box hay reglas. Las reglas del decoro político son las que debe jugar Acción Nacional, advirtió en entrevista previa a comentar el impacto de su libro Señales de alerta.

Espino, presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América, indicó que es válido subir el tono en política, pero lo que no es muy saludable es que se hagan expresiones carentes de fundamento.

En las últimas semanas, el dirigente panista Germán Martínez ha acusado al PRI de no tener voluntad política para aprobar leyes como la de extinción de dominio y combate al narcomenudeo, y ha hecho referencias a que tal actitud corresponde a aquellos que buscan proteger a delincuentes.

Al respecto, Espino dijo que no es deseable para el PAN sumarse a las escaramuzas, y opinó que el PRI tiene derecho a decidir las postulaciones de sus candidatos, incluso cuando de trate de personas que tengan carga de sospecha.

No es saludable, agregó, que de un partido a otro se hagan recomendaciones a los dirigentes de la casa de enfrente.

En otro tema, Espino no se ha descartado como aspirante a un lugar en la Cámara de Diputados, y en este sentido dijo que a cualquier ciudadano le gustaría legislar. ¿A quién le dan pan que llore? Pero no estoy seguro que a mí me quieran dar PAN, indicó.