México D.F. Martes 23 de noviembre de 2004
Después de 12 años volverá
a presentarse en el Auditorio Nacional el jueves
Al cantar tengo la letra en el alma y entrego mi mejor
versión: Tania
Alfonsina y el mar es un tema especial; "me da
suerte cuando lo interpreto", expresa
Negro color es el más reciente disco de
la cantante, quien ha grabado hasta en Africa
ARTURO CRUZ BARCENAS
Tania Libertad cantará 45 de los temas que la han
encumbrado en el difícil medio artístico mexicano, el próximo
25 de noviembre, en el Auditorio Nacional, donde no se ha presentado sola
desde hace 12 años. "Se me hizo difícil elegir el repertorio,
pues son muchos discos en mi carrera; hay quien me reclama que por qué
no canto algunas piezas. Será un concierto fuerte, en muchos sentidos",
expresó en entrevista.
La
guía de selección es básica: depende de lo que llama
"vías de vinculación entre el público y los discos,
con canciones del nuevo álbum, llamado Negro color, que saldrá
en estos días, más algo de Chico Buarque. El primer amor,
de Pablo Milanés, cosas de José Alfredo, de Manzanero, de
Fito Páez y del disco Africa en América, de Negro
Rada. Será un viaje interesante para mí y la gente. Nada
más de recorrerlo me puse a llorar varias veces".
Va con su banda de costumbre (integrada por seis músicos),
más otros cuatros maestros. Los primeros son Sonia, en los teclados,
dirección y arreglos; Félix Casaverde, guitarra; Chuco Mendoza,
bajo; Grabriela García, en varios instrumentos; Juanci Vázquez
y Raúl Oviedo, en percusiones, más dos coristas, otro percusionista
y "algunas sorpresitas".
Agregó que el concierto lo dedicará a Carlos
Díaz, Caíto, y a Mauricio Achar, recientemente fallecidos.
Con Caíto la une una amistad que se remonta a 1977. "Es una
persona inovidable. Con Achar, pues qué puedo decir. El fue el fundador
de la Gandhi, donde me presenté por primera vez, cobrando... no
sé... 40 pesos de esos días, por el 80 u 81. Fue increíble.
La Gandhi siempre fue un refugio para nosotros.
"En los años 80 comencé a meter mis primeros
discos ahí, en la Gandhi, cuando ninguna disquera me quería.
Yo los fabricaba; digamos que fui la pionera de los piratas. Me pirateaba.
Hacía mis casetitos y Mauricio me ayudaba. Hacía reventones
por los aniversarios. Lo de Caíto y él fue algo fuerte.
Todavía no se me acaba la tristeza."
-Mucho tiene que ver en su carrera Alfonsina y el mar...
-Mucho.
Esta es la tercera vez que la grabo. La primera versión es de 1973.
En ese disco, que estaba en un sello peruano, se me oye una voz de niña
que me da mucha ternura. Ahí también viene Concierto para
una sola voz. Luego circularon en discos Orfeón.
"La segunda versión es del disco Alguien cantando
(1983). La tercera es la del año pasado. Ese álbum se
llama Alfonsina y el mar, 20 años, disco de oro en mi sello.
Cuesta 79 pesos en Mixup y Sanborns, con una portada que ya la quisiera
la Björg. Negro color ya lo presenté en Europa".
Alfonsina y el mar tiene una conexión muy
fuerte con Tania. "Me da mucha suerte cuando la interpreto. La he cantado
en teatros que uno no se puede ni imaginar. La interpreté en Senegal,
de Dakar. Me gritaron que cantara Alfonsina... Me llamaban la mexicana
que canta Alfonsina. Lo hice y estuvieron llorando. Los técnicos
apagaron el ruido que hacía la planta de luz. El pasado 18 de octubre
la canté en el Olimpia de París, invitada por Bebo Valdés
y Diego El Cigala. En ese escenario estuve 35 minutos y cerré
con Alfonsina y el mar.
"Bebo no quiere venir a México, pero impone a Chucho,
su hijo. Son gente sensacional. El Cigala estaba de buen humor;
fue lindísimo. El Olimpia tiene una vibra... sentí a Edith
Piaf. He grabado cosas que ella cantaba, como Himno al amor."
-Ha cantado arias, ¿en qué parte del cuerpo
está el canto?
-En el alma. Jamás pensé que ese disco de
arias iba a tener el éxito que tuvo. No lo compró la gente
conocedora del género, pero quien sí lo hizo sumó
150 mil. Al principio no me salía. Decidí grabarlo cerrando
los ojos, como si estuviera cantando a José Alfredo Jiménez.
Ese es el secreto del vínculo con el público. La técnica
sirve para que te olvides de la voz. Sigo estudiando canto y la voz me
sale sola, Ya no me tengo que preocupar si me sale un gallo. Eso ya no
me preocupa y me dedico a atender la letra en mi cabeza, en mi corazón,
en mi alma, y a hacer mi mejor versión.
De José Alfredo "entendí su forma de cantar.
En sus canciones se pone como víctima. Varias cantantes están
grabando temas de él, en estos días, y han salido discos
rancheros, como el de Sasha Sokol. A veces alguien la pega y ahí
van los demás. Cuando grabé boleros, Luis Miguel no lo había
hecho. Mi disco salió en 1985 y fue un trancazo. Me pidieron otro
de boleros. Más de 400 mil copias. Soy una gran vendedora de discos,
en las buenas y en las malas.
"No voy nunca a la televisión y no me pasan nunca
en la radio. Me armo mis propias campañas, con uno que otro anuncio
en un periódico. Cumpliré, en 2005, 25 años de haber
llegado a México y más de 40 de trayectoria. Comencé
en esto a los 5 años y mi primer disco lo grabé a los 10
años. Ya ni me quiero acordar. He grabado 37 discos. Soy tenaz y
he grabado hasta en Africa."
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