Se impuso 1-0 en un partido de escasa calidad, pero cargado de emotividad

Portugal avanzó a cuartos de final y eliminó a España

Nuno Gomes anotó el gol que desató la alegría en el país anfitrión de la Eurocopa El técnico de la escuadra lusa, Scolari, fue más acertado en sus decisiones Sáez ingresó tarde a Morientes

DPA Y AFP

Lisboa, 20 de junio. España lloró como siempre y Portugal festejó como nunca. En un partido repleto de emoción aunque de escasa calidad, el cuadro luso venció 1-0 y se mantuvo con vida en su Eurocopa, mientras el español acumuló otro fracaso más a su lista.

Un gol de Nuno Gomes, en el minuto 57, selló el destino del clásico ibérico. Así, Portugal va a cuartos de final como primero de grupo y España hace maletas para volver a casa.

En la historia sin fin de los contrastes, los 35 mil portugueses que estaban en el estadio José Alvalade y los 10 millones que se quedaron fuera de él estallaron en júbilo.

En tanto, los 15 mil españoles que llenaron de color las calles de lisboa agacharon la cabeza y dijeron: "se veía venir".

En contraste, Madrid fue la desolación. El nervioso bullicio previo al juego dejó paso a un silencio sepulcral.

El partido fue malo, pero vibrante. Los lusos jugaron con mucho corazón y poca cabeza, pero con las ganas suficientes para llegar al área española con cierta facilidad.

Por su parte, los españoles parecían esperar que Rusia les hiciera el favor y goleara a Grecia, porque nunca mostraron la intención de clasificarse por sí mismos.

En la primera parte el peligro se sucedía en una y otra área. Cristiano Ronaldo volvía loco a Raúl Bravo, pero sus centros no encontraban a Pauleta.

En el ataque español Fernando Torres fue el único que demostró cierta iniciativa y se movió con extraordinaria velocidad ante el desconcierto de los centrales lusos.

En el segundo tiempo Luiz Felipe Scolari, técnico de los anfitriones, ingresó a Nuno Gomes por Pauleta y le funcionó.

Al minuto 57 el delantero del Benfica tomó el balón al borde del área, los defensas lo dejaron revolverse y buscar posición, y soltó un derechazo que entró como misil junto al poste derecho de Iker Casillas.

El gol fue como un golpe a la mandíbula de España. Los dirigidos por Iñaki Sáez se quedaron deambulando por la cancha sin sentido. Sólo Torres despertó y Xabi Alonso aprovechó su desmarque, pero estrelló la pelota en el travesaño cuando estaba solo ante el portero Ricardo Carvalho.

Aunque la necesidad era grande, España intentó con timidez; Carvalho sacó una volea de Luque y Juanito envió otro tiro al larguero. Scolari sustituyó a Figo por Petit, mientras España se hundía lentamente.

A 10 minutos del final Sáez retiró a Juanito y metió a Fernando Morientes como ariete y la respuesta en el banquillo contrario fue sacar a Cristiano Ronaldo y meter a Fernando Couto, un central más. El final fue benévolo para los españoles, pues Portugal se perdió un par de buenas opciones al contragolpe.

En rueda de prensa, Sáez señaló: "nuestro error ha sido no marcar un gol tanto en este partido, como en el torneo, ya que Grecia nos ha dejado fuera por ese motivo". No quiso hablar de una posible dimisión después de este mal resultado, al precisar que no es el momento adecuado.