México D.F. Lunes 21 de junio de 2004
El poeta, homenajeado por sus amigos en Bellas Artes
Imaginación, testimonio, coraje y rigor confluyen en la obra de Gelman
CARLOS PAUL Y ALFREDO VALADEZ RODRIGUEZ REPORTERO Y CORRESPONSAL
En la obra poética de Juan Gelman confluyen el rigor, la imaginación, el coraje y el testimonio, coincidieron en señalar ayer un grupo de amigos del poeta, que se reunieron en la sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes.
El encuentro fue para celebrar que Gelman fue galardonado con el Premio Iberoamericano de Poesía Ramón López Velarde 2004, el cual le fue entregado el pasado viernes en la ciudad de Zacatecas.
Con la participación de Hugo Gutiérrez Vega, Juan Domingo Argüelles y Silvia Molina como moderadora, en el acto en Bellas Artes se destacó que la obra de Gelman "es una de las más importantes en idioma español.
"Su voz se recrea en muchos países, donde es necesario exorcizar el olvido y la infamia". Sus temas, aseguró Molina, "adquieren un carácter universal. Desde la palabra abreva en la memoria y en la realidad inmediata, en la evocación y en la denuncia".
Para Juan Domingo Argüelles, Gelman -poeta de origen argentino, quien vive y escribe en México desde 1988 y es el primer "no mexicano" en recibir esa distinción- es un escritor cuya obra, al igual que la de López Verlarde, "consuela y abriga, en un mundo en el que las catástrofes y lo inhumano son asuntos de todos los días.
"Su poesía es una insistencia, una persistencia, una búsqueda del lenguaje, de palabras, de nombres, de formas de decir, con la esperanza de que la poesía diga algo aún en el silencio que sigue a la pregunta. La poesía de Gelman se da, sucede, nace, viene, llega, como escribiendo cartas al silencio, en busca de la claridad y para romper todos los cercos de ausencias."
Abundó: "es además una poesía cantada, aunque parezca redundante o pleonasmo, porque no todos los poetas conocen la canción del poema como la conoce Juan, quien jamás pierde el ritmo, ni la melodía, ni la nota. Sabe escuchar lo mismo la voz, que el silencio y conoce entonaciones y pausas y domina la música de la lengua española".
En su intervención Gutiérrez Vega se refirió a ese trabajo poético como un "buscar la luz, un abrirse paso entre la cerrada tiniebla, un no aceptar la derrota y hacer de la desesperanza una manera de reconciliarse con el mundo. De hacer un pacto de no agresión o un acuerdo de tregua prolongada con la historia y todos sus errores, injusticias e insensateces".
La poesía de Gelman, destacó, "reúne esas características y nos ayuda a reconciliarnos con los días y las noches y a redescubrir el asombro y la gloria de los alimentos terrenales".
Horas antes de recibir el premio en Zacatecas, Gelman explicó en entrevista que los best sellers tienen público, pero "la poesía tiene lectores. No son muchos, pero son fieles". En la actualidad, expresó, "lo que he observado es la presencia (en el quehacer poético) de muchos jóvenes, como si buscaran en la poesía respuestas a preguntas que ni la sociedad, ni la familia, ni las instituciones, ni los partidos políticos les saben dar".
Adelantó que este año se pondrá en circulación en Argentina y España, y posteriormente en México, su más reciente trabajo, País que fue será.
En tanto, en el Palacio de Bellas Artes, luego de agradecer y recordar los primeros contactos con la poesía de López Velarde (La Jornada Semanal, 20 de junio de 2004) concluyó con una generosa lectura de más de 15 poemas de su autoría.
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