México D.F. Viernes 23 de abril de 2004
Intenta que aporte soluciones a problemáticas concretas
Propone ANUIES realizar reforma integral al sistema de servicio social
En las próximas semanas la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) enviará a todos los rectores de las instituciones afiliadas una propuesta para reformar el servicio social, a fin de que los 300 mil jóvenes que cada año deben cumplir con esta obligación "contribuyan de manera sustantiva a la solución de problemáticas concretas en todos los ámbitos del desarrollo", afirmó Ana de Gortari, asesora de la Dirección General para el Desarrollo Educativo de este organismo.
Durante su participación en las jornadas culturales Universidad y Sociedad, organizadas por la Universidad del Claustro de Sor Juana, indicó que el servicio social no debe ser considerado como una mero trámite administrativo para la obtención de un título profesional, sino como un mecanismo que puede abrir perspectivas de desarrollo institucional y profesional.
La propuesta de reforma, que deberá ser analizada y discutida por las diversas instituciones de educación superior integrantes de la ANUIES, plantea una revisión del marco jurídico y regulatorio, así como su inserción curricular y la canalización de recursos financieros.
Asimismo propone el desarrollo de un sistema de información y estadística que incluya la ubicación geográfica, número de alumnos y su perfil profesional para realizar planeaciones estratégicas en los ámbitos municipal, estatal y nacional, y optimizar los recursos materiales y humanos con que se cuenta.
Especialista en la materia, De Gortari indicó que consolidar el servicio social como un compromiso solidario con los sectores más desfavorecidos no sólo depende de las instituciones educativas, sino de la sociedad en su conjunto.
Al respecto, reconoció que en nuestro país existe un déficit de formación ciudadana, "pues nuestra educación cívica ha dejado mucho que desear", por lo que, afirmó, la formación en valores debe ser un proceso que se retome tanto en la escuela como en los otros ámbitos de la vida social.
Pese a que los jóvenes enfrentan tasas de desempleo que duplican a las del conjunto de la población económicamente activa, y que luchan por no ingresar a la filas de la deserción, señaló que los que logran permanecer en el sistema educativo "representan un ejército de seres humanos que, preparados y bien formados, pueden servir socialmente a franjas importantes de mexicanos" y ayudar en lo posible en el combate a diversos problemas como la pobreza.
Para ello, afirmó, se requiere que tanto las escuelas como la sociedad demanden una educación que incluya valores como solidaridad, justicia social, tolerancia, inclusión y respeto a la diversidad, pues la escuela sigue siendo "una respuesta a la demanda juvenil de integración social que como individuos le corresponde en la familia, la comunidad y el país, así como a su demanda de mejores oportunidades gracias al incremento de conocimientos, habilidades, destrezas y conductas".
Una política educativa que incorpore programas universitarios que traten de servir a las comunidades, sobre todo a las más necesitadas, y contribuya a la construcción de una ciudadanía comprometida, puede ser altamente productiva tanto para la sociedad como para los futuros profesionistas, concluyó. LAURA POY SOLANO
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