Las delegaciones israelí y palestina, insatisfechas con el borrador del tema de urgencia

Empantana a la Uip resolución final

El texto "hace un llamado" para detener el muro en Cisjordania, pero no lo condena

BLANCHE PETRICH Y GEORGINA SALDIERNA

El proyecto de resolución que mañana adoptará la Unión Interparlamentaria (Uip) sobre el "tema de urgencia" -cese de actos de violencia y condiciones para una solución duradera en el conflicto israelí-palestino- no dejó satisfecha a ninguna de las dos partes en contienda. Por una parte, el texto ''condena y deplora profundamente" la práctica de asesinatos selectivos y atentados suicidas, lo que provocó que la delegación de Israel manifestara una reserva.

Por otra parte, el texto sólo "hace un llamado" para que el gobierno israelí detenga la construcción del muro que separa los territorios ocupados de Gaza y Cisjordania, pero se abstiene de condenar explícitamente la división, lo cual provocó el descontento de los parlamentarios palestinos.

El borrador de la resolución, que ayer empezó a circular después de cuatro días de trabajo de la comisión redactora, pone en un mismo plano de condena a ''los asesinatos selectivos'' -en relación con los atentados que en pocos días aniquilaron a dos cabezas del movimiento fundamentalista Hamas (el jeque Ahmad Yassir y su sucesor, Abdelaziz Rantissi), y los atentados dinamiteros que realizan comandos suicidas palestinos contra Israel. Los miembros de la Knesset no aceptaron esta redacción.

El texto también reconoce que Israel y Palestina deben ''adoptar medidas para volver a la mesa de negociaciones'', entre ellas el cese de la construcción del muro y el "uso de la violencia contra civiles israelíes" por parte de Israel.

La insatisfacción de las dos partes en disputa "es natural", explicó a La Jornada el presidente del Comité para el Medio Oriente de la Uip, Finni Martin Vallersnes. El diputado noruego señaló que después del asesinato de los líderes de Hamas y el reciente desconocimiento de los presidentes George W. Bush y Ariel Sharon de las fronteras de Palestina de 1967 (que representarían un nuevo despojo territorial, de concretarse) ''ya sabía que en esta reunión no llegaríamos a nada. Lo que me sorprendió fue que llegaran delegados de las dos partes a sentarse a la mesa de discusión del comité, este lunes".

En efecto, el lunes se llevó a cabo una mesa de trabajo entre todos los delegados de la Knesset y del Consejo Nacional Palestino (el órgano legislativo de los palestinos de la diáspora). El Consejo Legislativo Palestino (de representantes del territorio) no asistió. La sesión tuvo lugar a pesar de que ese mismo día, en Ramallah, era enterrado Rantissi y por otra parte se celebraba un aniversario más del Holocausto.

"Es un muy mal momento para hablar de volver al diálogo. Me dicen que es naive insistir en ello. Yo pienso que, por el contrario, es cuando más obligación tenemos los parlamentarios en convocar a la reanudación de la vía de solución política".

El hecho de no haber condenado la construcción del muro en la resolución final provocó el descontento de los delegados del Consejo Nacional Palestino con sede en Ramallah. Dalal Salameh, diputada palestina, denunció en rueda de prensa que "hubo presiones para que no se condenara la construcción del muro y no reconocer este hecho como un motivo de la violencia que existe en la región. La resolución no es lo que esperábamos. Se tenía que haber avanzado mucho más."

Majalli Whbee, miembro del oficial partido Likud de la Knesset, anticipó que la resolución que mañana adopte la plenaria no será satisfactoria para los israelíes. En la asamblea, dijo, asisten 80 partidos musulmanes y un solo israelí. Añadió que "la mayoría democrática del mundo comprende nuestra actitud", y relacionó, en un solo paquete, los ataques suicidas de la segunda intifada en Palestina con los atentados del 11 de septiembre en Nueva York y el 11 de marzo en Madrid, los atentados en Arabia Saudita y la resistencia armada en Irak.

''Los terroristas de la jihad islámica quieren controlar el mundo. Israel es un pilar en el mundo para evitarlo.''

Pese a la inconformidad que surgió entre las delegaciones de Palestina y la de Israel, María Antonio Martínez, senadora del Partido Socialista Obrero Español, dijo que una virtud de la resolución es que no pone adjetivos al terrorismo, el cual es malo venga de donde venga, sea de estado o no, subrayó. Por último defendió los términos del documento, pues, señaló que no se trata de hacer resoluciones contra nadie.