No aceptaremos participación de la Conmebol y la Concacaf: Padilla

En 2005 México irá directo a la Libertadores

MARLENE SANTOS A.

Aarón Padilla, presidente de Pumas, aseguró que será sólo en la próxima Copa Libertadores donde las confederaciones Sudamericana (Conmebol) y la Concacaf obtendrán ganancias de la eliminatoria mexicana, pero ya no podrá intervenir a partir de 2005, cuando se otorguen tres plazas a la Federación Mexicana de Futbol.

El directivo indicó que en los posteriores certámenes "no aceptaríamos por ningún motivo otra intervención, porque sería un negocio extra para equis persona". Inclusive agregó: "Para mí la próxima vez deben ir los dos campeones, de Apertura y Clausura, y el equipo que acumule más puntos en ambos torneos, esos tres".

Por el momento, reconoció que tanto la confederación regional y la sudamericana tendrán "una participación económica; no sé la cantidad ni el porcentaje".

No obstante, indicó que el sistema para disputar una plaza, aparte de la que pelearán Toluca y Monterrey, es mejor que el puesto en marcha en ediciones anteriores por el promotor Eduardo Aguirre.

"El desgaste físico será menor que en la Pre-pre, pues solamente hay por disputar tres partidos y la utilidad monetaria es mayor.

"Ya en la Libertadores los equipos mexicanos van a tener todas las utilidades como cualquier otro de Sudamérica", indicó Padilla, quien lamentó la exclusión de Pumas, club superado por un punto por Atlas.

Sin embargo, persisten algunas dudas y Rafael Lebrija, quien alista su viaje a Miami para el sorteo del torneo de Campeones de Concacaf, manifestó que no está claro lo de los derechos por transmisión televisiva y recordó que Monterrey debe participar en el certamen regional con todas sus figuras.

Por otra parte, el silbante Felipe Ramos Rizo, castigado por supuestas críticas al método con que Edgardo Codesal designa a los jueces para los partidos, se mostró resignado y arrepentido: "No tenía que haber hecho críticas, acepto que la regué. Me excedí y lo que uno hace mal lo tiene que pagar".

El árbitro mundialista en Corea del Sur-Japón, de oscuras ojeras naturales, agravó su imagen al perder cinco kilos de peso debido a los días de tensión que le ocasionó la disputa con Codesal y una vez más rechazó el tema de supuestos sobornos.

"Si todo esto afectó mi amistad con él, pues me apena, porque Codesal siempre impulsó mi carrera. Voy a poner punto final al tema, me alistaré para reaparecer en la fecha 11 y en octubre deberé estar listo para renovar mi gafete (internacional)", precisó.