El nombramiento, hoy; un priísta o perredista presidirá la Comisión de Derechos Humanos

El panista Ríos Díaz encabezará la Gran Comisión del Congreso yucateco

Tras cuatro intentos, 22 de 25 diputados locales acordaron una salida a la crisis en el Legislativo

LUIS A. BOFFIL GOMEZ CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 29 de agosto. En sesión extraordinaria de apenas cuatro minutos, 22 de los 25 diputados locales acordaron hoy reunirse este sábado para designar al panista Luis Ríos Díaz como nuevo presidente de la Gran Comisión del Poder Legislativo.

De esa manera conjuraron la posibilidad de que el Congreso cayera en un vacío de poder a raíz de la renuncia en ese cargo del coordinador de la bancada panista, Ricardo Gutiérrez López, y de cuatro intentos por obtener quórum.

Fuentes consultadas por La Jornada aseguraron que como parte de las condiciones para retornar a la legalidad, la bancada del PAN aceptó dos propuestas de las fracciones priísta y perredista: la primera es que, con excepción de los legisladores Fernando Castellanos Pacheco y Alberto del Río Leal, considerados como peones del gobernador Patricio Patrón Laviada, se nombrara para la Gran Comisión a una persona con actitudes conciliatorias, características que cumplía Ríos Díaz.

La segunda es que un priísta o el perredista Jorge Vallejo Buenfil ocupe la presidencia de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso en sustitución de la diputada federal electa, Beatriz Zavala Peniche. Este punto todavía está a discusión, pero se consiguió el objetivo principal de las bancadas opuestas al blanquiazul.

Después de una semana de incertidumbre provocada por la dimisión de Gutiérrez López y de cuatro intentos de sesionar, este día las fracciones de PAN, PRI y PRD optaron por retornar a la legalidad. Mediante un acuerdo privado, se convocó para el sábado a sesión ordinaria para formalizar la solicitud de licencia del funcionario renunciante.

Posteriormente se designará a los suplentes que cubrirán las vacantes de las diputadas Beatriz Zavala Peniche, del PAN; Ivonne Ortega Pacheco, del PRI, y del mismo panista Gutiérrez López. Las dos mujeres se incorporarán, el primero de septiembre, a sus tareas en la Cámara de Diputados federal.

El segundo punto tratará sobre la elección de la Mesa Directiva que fungirá a partir de septiembre hasta principios de noviembre, cuando termine el receso legislativo.

Con estas acciones se elimina la posibilidad de que intervenga el Senado de la República si para el domingo 31 de agosto no se lograba reunir el quórum para designar a los tres funcionarios que estarán al frente de la presidencia camaral.

Al término de la sesión, Cleominio Zoreda Novelo y Jorge Vallejo Buenfil, coordinadores de las fracciones de PRI y PRD, respectivamente, afirmaron que la legalidad retornó al Poder Legislativo y se evitó una crisis más grave que amenazó la gobernabilidad de Yucatán.

Felicitaron a sus contrapartes por dar muestra de sensibilidad y regresar al trabajo legislativo al aprobar la licencia definitiva de Gutiérrez López, a quien sus correligionarios lo consideran "traidor".

Hallan cadáver de empresario

En tanto, la Policía Judicial del Estado (PJE) informó que este día fue encontrado el cuerpo semicalcinado y torturado del empresario Jorge Nicoli Argüelles, en los montes de la comunidad de Chicxulub Puerto. Oriundo de Progreso -principal puerto del estado-, el propietario fue reportado por sus familiares como desaparecido la semana anterior.

La PJE informó que el cuerpo presentaba dos impactos de bala, (en espalda y abdomen) y el llamado tiro de gracia.

Hasta el momento, la policía investiga la línea del narcotráfico, debido a los antecedentes que Nicoli Argüelles tuvo a finales de los años 80 cuando fue detenido, en compañía de amigos, por estar relacionado con la venta de enervantes en Progreso. Tiempo después, su hermano Víctor Manuel también resultó apresado por supuestos nexos con el narcotráfico.

Nicoli Argüelles, conocido como El Mono, fue propietario de varias discotecas en Progreso en los años 80 y 90, pero al tiempo las vendió por tener problemas legales. En sus negocios, la PJE detectó que los muchachos consumían drogas.