Buenos oficios de la Secretaría de Hacienda para ceder el inmueble a la Iglesia católica

El cardenal Norberto Rivera pidió el ex Palacio del Arzobispado

Versiones eclesiásticas confirman que se acordó realizar una operación ''transparente''

La dirección de Promoción Cultural de la SHCP no se ha manifestado al respecto

JOSE ANTONIO ROMAN

Desde el pasado diciembre, ''altos funcionarios" de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ofrecieron sus ''buenos oficios" y el ''compromiso" para entregar en comodato el antiguo Palacio del Arzobispado a la arquidiócesis primada de México, luego de una petición hecha por el mismo cardenal Norberto Rivera Carrera, para convertirlo en museo de arte sacro.

Sin embargo, versiones de fuentes eclesiásticas coinciden en señalar que para realizar la operación de forma ''transparente" se acordó que la petición expresa se hiciera por un fideicomiso o instancias de la sociedad civil.

Se debe recordar que el interés por este inmueble no es reciente, pues después de que Norberto Rivera fue nombrado arzobispo, en junio de 1995, se elaboró un proyecto integral que no sólo consideraba la restauración de inmuebles religiosos, sino la adquisición de otros, para conformar un gran corredor de turismo religioso de la Catedral Metropolitana a la Basílica de Guadalupe.

Dentro de este proyecto está por concretarse, siempre con la ayuda de los gobiernos federal, local y delegacional, el de la Plaza Mariana, que no es otra cosa que la ampliación, casi al doble, del atrio de la basílica.

En este plan, que avanza de manera paulatina, se incluyó la entrega del antiguo cine Lindavista, también a la arquidiócesis, durante la pasada visita del papa Juan Pablo II, para convertirlo en el santuario de San Juan Diego.

Operación ''casi lista''

Hasta el momento, la Dirección General de Promoción Cultural y Acervo Patrimonial de la SHCP, dependencia que tiene bajo su resguardo el antiguo Palacio del Arzobispado (calle de Moneda 4, Centro Histórico), no ha hecho ninguna declaración oficial al respecto, pero personal de esta oficina reveló que la operación ''estaba casi lista" para realizarse a principios de este mes, pero por ''cuestiones políticas" se ha aplazado la entrega en comodato.

Inclusive se ignora si ésta se efectuará, debido al aumento en los días recientes de las ''presiones políticas". De hecho, directivos de Hacienda comentaron que a estas presiones se suma la iniciativa que presentó este martes la senadora priísta Dulce María Sauri en el pleno del Senado para solicitar información al Ejecutivo Federal en relación con el inmueble.

Desde la tribuna de ese órgano legislativo se acusó que la ''asociación civil" o ''institución privada" que hizo la solicitud formal del inmueble en realidad se trata de una instancia ''administrada por notables personalidades eclesiásticas" para la instalación de un museo de arte religioso. Y uno de los personajes de dicha asociación es precisamente el cardenal Norberto Rivera, quien tiene especial interés en el antiguo palacio.

La actitud de la Iglesia católica ha alertado a líderes de algunas iglesias históricas que tienen templos en el centro de la ciudad, pues temen que el gobierno federal, con petición eclesiástica expresa o sin ella, pretendan regresar algunos de estos inmuebles al clero. En alguna época, gran parte del Centro Histórico fue propiedad de la Iglesia católica.

Nuevo intento del clero

No es la primera vez que la Iglesia católica pretende recuperar el antiguo Palacio del Arzobispado, que desde 1994 funciona como museo de creadores plásticos de 4 mil obras. En 1968, por ejemplo, en una ''maniobra sospechosa, como la que podemos apreciar ahora", tres particulares reclamaron el dominio del inmueble so pretexto de que al no existir expediente en el Registro Público de la Propiedad y no quedar constancia clara de la propiedad de la nación sobre el inmueble, podrían reclamar los derechos del mismo.

De acuerdo con el contexto descrito en la iniciativa presentada por la senadora Sauri Riancho, en ese entonces el procurador general de la República, Julio Sánchez Vargas, interpuso el juicio de información ad perpetuam 167/68 para declarar plenamente y fuera de toda duda la propiedad de la nación sobre dicho inmueble.

Con base en esos antecedentes documentales presentados, el juzgado primero de distrito en materia civil emitió sentencia el 19 de junio de 1969 y declaró a la Federación legítima propietaria del antiguo Palacio del Arzobispado, fallo que fue ejecutado el 17 de abril de 1970.

''En una acción por demás confusa que despierta grandes suspicacias, dado que se busca de nuevo afectar el control gubernamental de un inmueble con notable significación histórica y política", la Dirección General de Patrimonio Inmobiliario Federal de la Comisión de Avalúos de Bienes Nacionales dio respuesta aparentemente afirmativa desde el pasado 8 de noviembre a una solicitud ''presentada por un grupo privado para tener el control del citado ex palacio", dice el punto de acuerdo que propuso la senadora priísta.