Presencia del Ejército, para el "combate
a las drogas"
Sigue el plantón en Huaxcaleca, Puebla, por
falta de servicios
LA JORNADA DE ORIENTE
Puebla, Pue., 7 de marzo. Desde el 27 de febrero
miembros del Ejército y de las policías estatal y municipal
vigilan la junta auxiliar de Huaxcaleca, perteneciente al municipio de
Chichiquila, sitio en el que habitantes del lugar pertenecientes a la Unidad
Nacional Anáhuac (UNA) mantienen un plantón en protesta por
la carencia de servicios elementales que, argumentan, les han sido negados
por el ayuntamiento. Ahora también demandan la libertad de uno de
sus líderes. Desde que iniciaron sus demandas dos de sus dirigentes
fueron detenidos, aunque uno fue liberado ayer y hay probabilidad de que
haya negociaciones el lunes.
En
esta comunidad, enclavada en las inmediaciones de la sierra de Zongolica,
en la falda norte del volcán Citlaltépetl, se vive una gran
tensión. Los habitantes se cubren los rostros con rebozos, paliacates
o pasamontañas -porque aseguran que están siendo fotografiados
por las autoridades- y tienen palos que exhiben cuando se sienten amenazados.
Los cuerpos armados se encuentran en número considerable para una
localidad como ésta, que tiene unos 2 mil 500 habitantes y ocupa
el lugar 22 de muy alta marginación en el estado.
El gobierno estatal informó que las demandas de
los habitantes son inadmisibles, porque pretenden no sólo que se
hagan obras públicas por 100 millones de pesos, sino porque quieren
manejar los recursos ellos mismos, lo que es improcedente en la normatividad
municipal.
Según el secretario de Gobernación del estado,
Carlos Arredondo, otra de las demandas que no está en manos del
gobierno resolver es la creación de un municipio, petición
que corresponde resolver al Congreso del estado.
Sobre las detenciones de los dos líderes, se asegura
que obedecieron a que ambas personas encabezaron un grupo que secuestró
a uno de los caciques de la cabecera municipal, de nombre Arsenio Sedas.
Arredondo confirmó que hay órdenes de aprehensión
pendientes contra otros miembros de la UNA, a los que acusó de instigar
a los pobladores de Huaxcaleca para que desconozcan a las autoridades de
la cabecera municipal y se constituyan en municipio autónomo.
La presencia del Ejército en la zona, señaló
el funcionario, no tiene que ver con el movimiento de pobladores de Huaxcaleca,
sino con el combate a las drogas, porque se encontró en la zona
un sembradío de mariguana mayor a una hectárea. En diferentes
ocasiones se ha informado de la presencia de grupos guerrilleros en la
sierra de Zongolica, lo que hace establecer un posible vínculo de
las fuerzas armadas con su actividad en la zona.
Por su parte, el gobernador del estado, Melquiades Morales,
insistió ayer en que el movimiento está manipulado por personas
del Distrito Federal, y aseguró que no usará la fuerza pública
para retirar el plantón y las tres barricadas que están a
la entrada de Huaxcaleca para obstaculizar la llegada de los fuereños.
Desde un cerro los miembros de la UNA continúan
las 24 horas en alerta ante la posibilidad de nuevas incursiones de los
uniformados. En la última de las zanjas colocaron una cuerda con
la que impiden el paso a la gente, y le exigen a los fuereños
el pago de un peaje para recabar fondos y mantener su plantón, además
indicaron que esa medida los hace sentirse un poco más protegidos.
Unos 50 miembros de la UNA también han realizado movilizaciones
frente a la sede del gobierno estatal y los juzgados de defensa social.
Según el Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática, en Huaxcaleca se carece por completo
de drenaje, hay siete habitantes por casa, sólo existe un teléfono
y 40 por ciento de la población recibe menos de dos salarios mínimos.