"Inmorales e indecentes", las denuncias, dice el ministro del Interior español
"Fui sometido a torturas y malos tratos", acusa director del diario en vasco Egunkaria
El escritor Joan Mari Torraealdai "fue molido a palos", afirma el titular del rotativo
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 26 de febrero. Martxelo Otamendi, director del periódico vasco Egunkaria (Día a día), que fue cerrado el pasado jueves por orden de un juez de la Audiencia Nacional de España, denunció durante la víspera, a su salida de la prisión de Soto del Real, haber sido víctima de "torturas y malos tratos" durante el régimen de incomunicación al que fue sometido.
El periodista fue detenido el mismo día en que fue cerrado el diario junto con otros nueve altos cargos del rotativo, todos acusados de "pertenencia a la organización terrorista ETA".
El cierre del único diario escrito íntegramente en euskera se encuentra todavía en fase de instrucción judicial, pero la medida, dispuesta por el juez Juan del Olmo y el Ministerio del Interior español, se adoptó de facto al ordenar también el cierre de las sedes del rotativo, al que además le fueron congeladas las cuentas bancarias.
El magistrado, que sostiene que ETA y el periódico clausurado tienen vínculos y comparten una misma "estrategia y fin", pese a que desde distintos sectores nunca se identificó al rotativo como ligado al grupo armado, decretó la víspera la libertad bajo fianza de cuatro de los 10 detenidos, entre ellos Otamendi, quien a su salida denunció haber sufrido tortura y amenazas.
Este, que denunció "total impunidad y chulería de los guardias civiles", narró: "Me han hecho dos veces la bolsa (tapar la cara con una bolsa de plástico hasta provocar la asfixia del detenido), me han tenido desnudo en cuclillas, me han dicho las ma-yores barbaridades sobre la cultura vasca, sobre la consejera Azkarate y el lehendakari (Juan José Ibarretxe, presidente del go-bierno regional vasco). Me pusieron una pistola sin bala apuntado en la sien".
El director del diario también dijo que fue "insultado" repetidas veces, así como a los también detenidos en la operación, Xavier Alegría y el escritor Joan Mari Torrealdai, quien habría sido "molido a palos".
Esos túneles "de la impunidad no pueden seguir siendo la gran asignatura pendiente. No es posible que en 2003 suceda esto, que se puede evitar", dijo el periodista, quien rechazó cualquier vínculo con ETA y sostuvo que su único objetivo al frente del diario es la difusión del euskera.
El ministro del Interior español, Angel Acebes, consideró "inmorales" e "indecentes" las acusaciones de Otamendi, y advirtió que próximamente presentará una querella por difamación contra los denunciantes de las supuestas torturas.
"Aquí el único que viola los derechos fundamentales de los ciudadanos y las li-bertades es la banda terrorista ETA, que verdaderamente tortura y mata", afirmó.
Además, el funcionario dijo que los detenidos han "aplicado lo que siempre hacen todos los terroristas, es decir el manual de ETA denunciando torturas falsas" contra las autoridades policiales.