El brother del ex presidente pide que termine el fuero de facto
Zedillo debe declarar, afirman Sauri y Roque
ANDREA BECERRIL Y ENRIQUE MENDEZ
Los ex dirigentes nacionales del PRI Dulce María Sauri y Humberto Roque afirmaron que Ernesto Zedillo debe aclarar si conoció y encubrió el financiamiento ilegal a la campaña de Vicente Fox, aun cuando un mes antes de las elecciones de 2000 el ex presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Eduardo Fernández, le notificó las operaciones de Amigos de Fox.
Roque Villanueva -a quien Zedillo consideró su ''brother'' en 1997- advirtió que ya es tiempo de terminar con el ''fuero de facto'' del que gozan los ex presidentes de la República, y sobre todo después de las revelaciones de Fernández, que ''verdaderamente cimbran la política nacional''.
Insistió en que la mención que Fernández hizo de Zedillo ''es muy fuerte y la PGR no puede omitir convocarlo para que haga la aclaración correspondiente'', y consideró que si el ex mandatario es citado ante el Ministerio Público ello no afectaría al tricolor, pues ''él está ampliamente desvinculado del partido''.
Roque Villanueva recalcó que ''es un secreto a voces que Zedillo no tiene mayor simpatía dentro de las filas priístas, y no veo que ningún militante del partido se preocupe por lo que vaya a declarar''.
Y aun cuando durante su mandato el propio Zedillo marcó la ''sana distancia'' con el PRI, ayer la actual dirigencia partidista -que en diciembre pasado se negó a expulsarlo de sus filas- evadió responder a las preguntas sobre la necesidad de que el ex mandatario aclare por qué no ordenó investigar a Amigos de Fox.
En un comunicado, el PRI exigió que así como se detuvo a Eduardo Fernández, aunque su aprehensión haya sido ''arbitraria y propia de un Estado autoritario'', y previa advertencia presidencial, también debe consignarse a los integrantes de Amigos de Fox que lavaron dinero para financiar la campaña de la Alianza para el Cambio en 2000.
El comité nacional priísta exigió que se respeten los derechos humanos de Fernández y luego, en una sesión de preguntas y respuestas, el vocero y el coordinador jurídico del tricolor, Carlos Jiménez y Miguel Angel Yunes, respectivamente, evadieron las preguntas sobre la responsabilidad de Zedillo, a quien el ex titular de la CNBV le informó sobre las irregularidades financieras de la campaña foxista.
Ambos afirmaron que el tema central de este escándalo es que se cometió un delito y no Zedillo, e incluso señalaron que involucrar en este momento al ex presidente forma parte de ''una estrategia del gobierno para distraer la atención''.
-Fernández dijo que Zedillo sabía del lavado de dinero. ƑQué debemos entender? ƑQue Zedillo entregó descaradamente el poder a la ultraderecha?
-Esas son estrategias de distracción -eludió Yunes; mientras que Jiménez Macías dijo: ''Esa es una estrategia de medios. Nosotros no podemos permitir que el asunto se desvíe''.
La senadora Sauri consideró que Zedillo sí puede aportar elementos que permitan despejar dudas sobre el momento en que conoció las operaciones presuntamente ilegales del grupo Amigos de Fox, y qué instrucciones le dio a Fernández.
Al mediodía, durante el arranque del programa de brigadistas del Movimiento Territorial del PRI en el Distrito Federal, el dirigente de esa agrupación, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, afirmó que la asociación civil Amigos de Fox "es un icono de la corrupción'', y en respuesta a las críticas del dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, dijo:
''A ese hombre que ve a San Francisco de Asís en la figura de Fox, cito lo que decía el filósofo británico John Stuart Mill: 'los conservadores no son necesariamente idiotas, pero la mayor parte de los idiotas son conservadores'. Y en el equipo de Fox y en el PAN, štodos son conservadores!'', exclamó.
Un cuento de hadas
En su discurso, el dirigente de los pepenadores armó una ''fábula'' en la que caracterizó a Marta Sahagún como ''el hada madrina que, con su varita mágica, dota a niños de bicicletas o computadoras, sin importar que no cuenten con alimentos, caminos y mucho menos electricidad'', y al Presidente como un ''duendecillo'' que ''por desgracia siempre hace de las suyas, comete indiscreciones y a veces pone en riesgo las buenas intenciones del hada''.
Afirmó que aun cuando los dos hubieran querido vivir en el castillo de Chapultepec, ''se conformaron con la sombra de unos pinos''.