No somos escudos humanos, afirma Mario
Saucedo
Viajan a Irak 7 miembros de la Misión Mexicana
por la Paz
JOSE GALAN
Siete miembros de la plural Misión Mexicana a Irak
por la Paz partieron ayer a Bagdad con el respaldo de millones de voces
que en nuestro país y otras naciones se oponen al conflicto que
el gobierno estadunidense pretende desatar contra Saddam Hussein y toda
la población iraquí.
Familiares, amigos y colaboradores los despidieron en
el aeropuerto internacional Benito Juárez con gritos de "no a la
guerra, sí a la paz" y "de Chiapas a Bagdad, queremos la paz".
Fueron numerosas las muestras de apoyo y solidaridad de
viajeros nacionales y extranjeros que llegaban y salían de la terminal
aérea. Una pancarta resumía el sentir de los familiares:
"Los esperamos de regreso".
Mario
Saucedo, secretario de Relaciones Internacionales del PRD, afirmó
que se trata de una delegación plural, apartidista, solidaria con
todos los movimientos pacifistas nacionales e internacionales, "pero no
representamos a nadie. Sólo somos un grupo de personas preocupadas
por la política belicista y genocida del gobierno estadunidense.
Sentimos, eso sí, que hay en nosotros el sentimiento de un gran
pueblo, el mexicano, en contra de la guerra".
Mientras realizaba trámites y registros de vuelo,
Daphne Cuevas, del Consorcio Parlamentario y por la Equidad AC, afirmó
que se trata de un viaje contra la guerra, "porque los hechos armados niegan
nuestra humanidad. Por eso, buscaremos generar acciones pensando siempre
en las mujeres y los niños, las primeras víctimas en cualquier
guerra".
En la delegación participan también Adrián
Belman y Luis A. Ceballos, del Sindicato Mexicano de Electricistas; Nuria
Marrugat, del organismo Salud Integral para la Mujer; Efraín Naranjo
Cortés, de la Red Todos los Derechos para Todos, y Alejandro Rojas
Díaz Durán, de la Fundación para la Democracia. De
último momento el diputado federal por el Partido del Trabajo, Félix
Ceballos, canceló su viaje debido a que fue intervenido quirúrgicamente.
Al grupo se sumaron dos enviados de este diario: la reportera
Blanche Petrich y el reportero gráfico José Refugio Núñez.
Antes de ingresar al área de migración,
los miembros del grupo insistieron en que el presidente Vicente Fox Quesada
debe levantar "una voz clara y contundente en favor de la paz", durante
las próximas votaciones del Consejo de Seguridad de la Organización
de las Naciones Unidas (ONU). "La única arma que llevamos es la
vacuna de la paz contra las ansias de guerra que trae el señor Bush",
dijo Mario Saucedo, quien reiteró "nosotros no vamos como escudos
humanos. Sencillamente vamos en misión de paz".
El grupo efectuará una escala este domingo en Amsterdam,
para luego volar a Ammán. Casi 18 horas de vuelo. De allí,
por carretera otras 13 horas a Bagdad, ciudad en la que se entrevistarán
con representantes del gobierno iraquí, y en la que pretenden visitar
escuelas, hospitales, albergues y asilos, siempre acompañados por
funcionarios del gobierno de Irak.
Mario Saucedo reveló que no recibieron ninguna
respuesta a las cartas enviadas al presidente Vicente Fox; al canciller
Luis Ernesto Derbez; al secretario general de la ONU, Kofi Annan; al mandatario
estadunidense George W. Bush, y al Congreso de Estados Unidos. "No hay
ninguna señal. Las cartas fueron enviadas notificando de nuestra
intención. Así que saben que estaremos allí", dijo.
"Está claro que el no a la guerra es la voluntad
de millones de mexicanos que están en favor de una salida pacífica
de los conflictos y en contra de la solución armada."
-¿Qué pasará si en el peor de los
escenarios estalla la guerra mientras ustedes están allí?
-se le preguntó a Mario Saucedo.
-Nuestra misión, como la de todos los grupos pacifistas,
habrá terminado sin éxito, y regresaremos a casa. Insisto,
no vamos como escudos humanos. Tenemos pensado estar allí
alrededor de 15 días. Pero confiamos en que eso no suceda, que Estados
Unidos y sus aliados recapaciten, y no pase nada. La guerra no es inevitable.