Se preparan cambios en el gabinete, aunque opositores
piensan que ya es tarde
10 mil trabajadores bolivianos piden la dimisión
de Sánchez de Lozada
El presidente hizo oficial su renuncia al sueldo para
donarlo a un orfanato y a un asilo
AFP, DPA Y REUTERS
La Paz, 17 de febrero. Miles
de trabajadores de la ciudad de El Alto pidieron hoy aquí la renuncia
del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, a raíz del estallido
social que la semana pasada dejó una treintena de muertos, mientras
el paro general convocado por la Central Obrera Boliviana (COB), también
para pedir la dimisión del gobernante, fue apoyado sólo por
algunos sectores gremiales.
En tanto, los anuncios de recortes de gastos y diálogo
hechos por el mandatario fueron recibidos con poco optimismo por distintos
sectores de Bolivia. "Nuestro presupuesto no va a ser un presupuesto del
Fondo Monetario Internacional (FMI)", dijo anoche Sánchez de Lozada,
quien oficializó este lunes su renuncia al sueldo mensual como jefe
de Estado, el cual será donado a un orfanato y a un asilo de ancianos.
Obligado
por las protestas sociales, Sánchez de Lozada -quien en agosto emprendió
un segundo mandato no consecutivo- prepara además la formación
de un nuevo gabinete, ya que entre cinco y seis ministerios, 17 viceministerios
y 30 direcciones generales quedarían eliminados con el plan de austeridad.
Fuerzas políticas de la oposición opinaron
que se necesitan cambios radicales. "Es insuficiente a estas alturas pensar
solamente en un recambio de ministros (...) esto lo que va a hacer es seguir
dejando al presidente como el eje central del conflicto y eso es gravísimo
para la democracia", dijo el diputado Dante Pino, de Nueva Fuerza Republicana.
Por su parte, Felipe Quispe, líder del Movimiento
Indígena Pachakuti y dirigente campesino, anticipó que está
a la espera sólo de un error más del gobierno para comenzar
con las movilizaciones. Otro sector opositor, el Movimiento al Socialismo,
calificó los anuncios del gobierno de "paliativos".
De su lado, más de 10 mil trabajadores de El Alto,
según datos de la policía, recorrieron unos 14 kilómetros
a pie desde esa ciudad hasta La Paz, en el contexto de movilizaciones programadas
por la COB para instar a dimitir al gobernante neoliberal.
La manifestación colapsó el tráfico
del centro paceño, aunque transcurrió en absoluta tranquilidad.
La COB había lanzado un llamado al paro entre lunes
y martes, pero su convocatoria tuvo poco efecto, ya que no obtuvo la adhesión
de importantes sectores como los de educación, salud, transporte,
campesino o el de los cocaleros.
Además, el Estado Mayor del Pueblo, formado en
enero por organizaciones sindicales y cívicas, había dado
la víspera un plazo de 15 días al gobierno "para resolver
todos los pedidos de los trabajadores y organizaciones del país".
La organización, encabezada por el líder cocalero Evo Morales,
exige también la dimisión de Sánchez de Lozada.
En Buenos Aires, decenas de residentes bolivianos en Argentina
se congregaron ante su embajada para para protestar por la treintena de
muertos en los incidentes que estallaron cuando el gobierno decidió
imponer un impuesto al salario.
"Pedimos juicio y castigo a los responsables de las 33
muertes y libertad a los luchadores sociales presos", dijo Carlos Chile,
del Movimiento Territorial de Liberación, de piqueteros (desocupados)
argentinos, que apoyó la demostración, en la cual los manifestantes
entonaron cánticos contra Goni Sánchez de Lozada,
a quien acusaron de "servir a los yanquis", mientras pidieron "el destierro
de las políticas neoliberales de América Latina".