El MCC, que tomó la alcaldía el 23, pretendía rodear la casa donde despacha Picazo Pérez
Despliegue policiaco en Coyutla ante amenaza de boicot al informe edilicio
Incurre en ilegalidad pues no hay cabildo ante el cual rendir cuentas, asegura la organización
GUADALUPE LOPEZ CORRESPONSAL
Jalapa, Ver., 27 de diciembre. Alrededor de 500 granaderos y 40 patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública del estado resguardaban la cabecera municipal de Coyutla ante la advertencia del Movimiento Ciudadano Coyutleco (MCC) de boicotear el segundo informe del alcalde Basilio Picazo Pérez, que efectuaría en su domicilio particular, donde despacha desde enero de 2001 debido a que el palacio municipal se mantiene en poder de los disidentes.
Juan López, vocero del MCC señaló que los mandos policiacos manifestaron que su presencia "es para resguardar la casa donde Picazo Pérez rendiría su informe", ya que los coyutlecos anunciaron que la rodearían para evitar que el edil incurra en ilegalidad porque para ellos el ayuntamiento "no existe". Sin embargo, dijo, los miembros de dicha organización acordaron no hacer acto alguno que pudiera generar un enfrentamiento.
El MCC, que el 23 de diciembre ocupó nuevamente la alcaldía y nombró un concejo municipal, pretendía rodear la casa donde ha funcionado el ayuntamiento para evitar que Picazo Pérez rindiera su informe y asimismo tenía planeado blo-quear la carretera de acceso a esta población ya que considera que el edil incurriría en "ilegalidad" al no existir un cabildo ante el cual rendir su informe.
Explican que el cabildo no existe porque el síndico Miguel Alfonso Vázquez desde hace seis meses no se presenta a laborar y la regidora Hortensia Escudero Escamilla renunció hace tres meses aproximadamente.
Ambos ediles enviaron al presidente de la Comisión Permanente del Congreso local, Ignacio González Rebolledo, un documento en el cual se deslindan de cualquier "irregularidad" que pudiera haber en el manejo de la cuenta pública de este año, ya que, dijeron, por estar separados de sus cargos no han firmado dicho documento e ignoran el destino que se pudiera haber dado a los recursos municipales y a los del ramo 33.
Antes de las 16 horas cerca de dos mil indígenas pertenecientes al MCC se reunieron fuera del palacio municipal con la intención de trasladarse a la casa de Picazo Pérez para boicotear su informe y para bloquear la carretera, pero sus dirigentes los convencieron de entrar al inmueble para evitar provocaciones y un posible desalojo de la policía.
El 23 de diciembre el MCC tomó de nuevo la alcaldía de Coyutla y nombró su propio concejo municipal, decisión a la cual llegó después de dos años de esperar que el Congreso local emita una resolución a su petición de desaparición de poderes municipales.
