Un soldado estadunidense murió la mañana de este sábado al recibir disparos mientras patrullaba en Shkin, cerca de la frontera con Pakistán, en el sudeste de Afganistán, en una operación de búsqueda de talibanes y miembros de la red Al Qaeda de Osama Bin Laden.

El viernes, dos soldados estadunidenses resultaron heridos en diferentes situaciones. Uno, cerca de Asadabad, capital de Kunar, cuando cohetes cayeron en un complejo que alberga las viviendas de las fuerzas de la coalición. El otro resultó herido con un lanzagranadas durante un entrenamiento en Kandahar.

Asimismo, siete soldados alemanes de la Fuerza Internacional de Paz en Afganistán (ISAF, por sus siglas en inglés) fallecieron al precipitarse este sábado a tierra el helicóptero en que viajaban cerca de Kabul, por problemas aparentemente técnicos.

El portavoz alemán de las ISAF en Kabul, Andreas Steffan, aseguró que los expertos han descartado que se trate de un ataque contra el aparato. Testigos aseguraron que la nave cayó envuelta en llamas cerca de la base francesa de la fuerza internacional. El vocero del gobierno afgano, Gordon McKenzie, coincidió con su par alemán en que no hubo disparos del enemigo en el momento del incidente.

El ministro alemán de Defensa, Peter Struck, dijo en Berlín que el helicóptero, un CH-53, se precipitó sobre una casa vacía. No obstante, dos niñas de una vivienda vecina fueron reportadas como desaparecidas y queda sin aclarar si resultaron afectadas por el siniestro.

El jefe de seguridad de Kabul, Mohammad Basir Salalngi, indicó que en tierra murieron dos afganos. El incidente se produjo luego de una serie de ataques ocurridos en Afganistán.