José Cueli
La crueldad inventa nuevos recursos
Al retomar la reflexión en torno de la crueldad y el texto Estados de ánimo del psicoanálisis, de Jacques Derrida, quisiera hacerlo con la cita en la que el filósofo francés interpreta a Sigmund Freud y a Friedrich Nietzsche en cuanto a que para ellos la crueldad seguirá siempre inventando nuevos recursos.
Si las cosas son así y la crueldad es capaz de inventar cada vez nuevos recursos para expresarse y manifestarse, Ƒqué pasa cuando además de seguir siendo un concepto ''oscuro y enigmático", como expresa Derrida, pretendemos combatirla y legislar desde marcos éticos y jurídicos rígidos y obsoletos?
Ante estos planteamientos surge un alud de preguntas de cara a la realidad. La presencia de la crueldad en la historia de la humanidad es una constante, sin embargo en la actualidad las manifestaciones de ésta y la diversidad de las mismas resulta apabullante.
ƑQué pena o condena debe aplicarse a un secuestrador que hostiga, martiriza y mutila a su víctima y además ejerce tortura mental contra los familiares del secuestrado? ƑCómo entender y cómo aplicar la justicia en los casos de adolescentes que asesinan a compañeros de clase y a profesores? ƑQué hacer con los homicidas en serie? ƑQué condena merecen los terroristas (asesinos) que agazapados tras las falsa defensa de un nacionalismo matan a centenares de gente inocente dejando heridas y duelos de difícil elaboración en las familias y en la sociedad civil?
Es más, Ƒcómo interpretar que el terrorismo pretenda combatirse con ''justicia infinita" o con ''tormentas en el desierto" prometiendo a cambio una ''libertad duradera", cuando lo que existe por debajo son mezquinos intereses económicos y un ensoberbecido y delirante orgullo, además de una ceguera total por el poder?
Preguntas y sólo preguntas que no hacen sino confirmar que a pesar de ver las múltiples y espeluznantes máscaras de la crueldad, en esencia, de ella, no sabemos nada. La justicia es ciega e incompetente, y se imparte desde el supuesto estado de derecho sin contar con lo inadecuado y obsoleto de las legislaciones en torno de los crímenes perpetrado a la luz de la crueldad.
De allí que Derrida denuncie la total incompetencia para enfrentar la crueldad, ya que todas las explicaciones posibles dentro de los campos teológico, jurídico y ético actuales pretenden brindar explicaciones (inútiles e inacabadas) atrapadas o avaladas por algún tipo de ''coartada". Por tanto, reta al sicoanálisis a meditar y trabajar sobre ello, pues para el filósofo el sicoanálisis sería justamente "el nombre de eso que, sin coartada teológica ni de otra clase, se volcaría hacia lo que la crueldad síquica tendría de más propio".
Derrida se pregunta: ''ƑQué significan crueldad, soberanía y resistencia? ƑQué les hacemos significar? Y, sobre todo, Ƒen qué una cosa que se llama el sicoanálisis puede otorgar, inclusive cambiar, el sentido de esta pregunta precedente?"
En su opinión, que comparto, hay una abierta crítica a las instituciones, conceptos y prácticas arcaicas de la ética, de lo jurídico y de lo político ''que parecen todavía dominadas por una cierta lógica, es decir, por una cierta metafísica onto-teológica de la soberanía (autonomía y omnipotencia del sujeto)".
Ante ello exhorta al sicoanálisis a penetrar y pensar en estos campos, ''particularmente en esos lugares sísmicos donde tiembla el fantasma teológico de la soberanía y donde se producen los acontecimiento geopolíticos más traumáticos, digamos incluso, confusamente, más crueles de estos tiempos".