EU insiste en que se designe nueva dirección palestina
La violencia en Levante causa otras 11 muertes
Israel ofrece retirar sus tropas de Belén en Navidad
AFP Y DPA
Jerusalen, 12 de diciembre. Siete palestinos y cuatro israelíes -entre éstos dos militares- murieron en una nueva jornada de violencia en Medio Oriente, mientras en Washington el secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, reiteró el deseo de la Casa Blanca de ver surgir una nueva dirección palestina.
Cinco palestinos fueron ultimados por soldados israelíes el miércoles por la noche cerca del cruce de Karni, entre la franja de Gaza y el territorio israelí. En la madrugada del jueves, un palestino fue muerto por guardias fronterizos cuando intentaba penetrar en el bloque de colonias judías de Gush Katif (sur de la franja de Gaza).
Por la noche, dos soldados, un hombre y una mujer, fueron víctimas de disparos palestinos cerca de un asentamiento ilegal en Hebrón, sur de Cisjordania, según una fuente médica.
Además, un activista procedente de Gaza murió durante un tiroteo con soldados israelíes en el desierto de Neguev (sur de Israel).
Asimismo, sujetos armados mataron hoy a dos colonos israelíes, un hombre y una mujer, en la sureña ciudad cisjordana de Hebrón, reportó la radio israelí.
En Washington, Powell afirmó que la paz en Medio Oriente pasa por una "dirección nueva y diferente" para los palestinos, con "nuevas instituciones y el fin del terror y la violencia".
Su país, agregó, se mantiene favorable a la coexistencia de dos estados, israelí y palestino, que vivan "lado a lado en seguridad" y a la "creación de una Palestina democrática y viable, si es posible, en 2005".
En Jerusalén, el primer ministro israelí, Ariel Sharon, se reunió con el subsecretario de Defensa de Estados Unidos, Douglas Feith, para discutir sobre los temores israelíes en caso de represalias de Bagdad a un ataque del país norteamericano.
Feith se reunió además en Tel Aviv con el ministro israelí de Defensa, Shaul Mofaz, que debe viajar a Estados Unidos la semana próxima. Ambos discutieron sobre maniobras militares comunes previstas para enero, con el objetivo de probar armas antimisiles.
Los israelíes temen ser tomados como blanco por Bagdad en caso de conflicto en Irak, como sucedió durante la Guerra del Golfo, en 1991.
Por otra parte, la justicia israelí retomó este jueves en Tel Aviv el proceso del líder de Fatah en Cisjordania, Marwan Barghouti, acusado entre otros delitos de asesinato como jefe de una "organización terrorista".
Contrariamente a la opinión de los defensores del dirigente palestino, el tribunal del distrito de Tel Aviv se declaró competente para juzgar a Barghouti, detenido en abril pasado.
El ministro de Colectividades locales palestino, Saeb Erekat, calificó esta decisión de "política", juzgándola contraria a los acuerdos firmados entre israelíes y palestinos. El proceso, que comenzó hace tres meses, se reanudará el 19 de enero tras una audiencia técnica el 2 de enero pasado.
Por último, el presidente israelí, Moshe Katzav, quien realizó hoy una histórica visita al Vaticano, prometió al papa Juan Pablo II que el ejército de su país se retirará de Belén en Navidad, siempre y cuando no exista una situación de alerta terrorista. "En cualquier caso, las tropas harán todo lo posible para permitir que los peregrinos celebren las festividades en forma apropiada", aseguró.