El gobierno de Hugo Chávez militarizó ayer los principales centros de distribución de combustibles de Caracas y otras ciudades, al continuar la huelga en la paraestatal petrolera. El director de la empresa, Alí Rodríguez, advirtió que el país podría sufrir un ``desastre nacional'' de continuar el paro y que se tendrá que pagar una multa de 6 mil millones de dólares si se incumplen obligaciones. Las autoridades venezolanas ofrecieron ayer negociar un cronograma de elecciones con grupos opositores FOTO REUTERS