El próximo jueves habrá conferencias sobre el uso de esta tecnología en Brasil y EU

Habrá urnas electrónicas en las elecciones de 2003

RAUL LLANOS SAMANIEGO

Durante la elección constitucional de julio de 2003 el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) instalará 50 urnas electrónicas para comprobar su eficacia y determinar si es posible su utilización en futuras votaciones en esta ciudad.

En conferencia de prensa, los consejeros Rubén Lara y Juan Francisco Reyes del Campillo, precisaron que en esos comicios se pondrá una urna electrónica por cada distrito electoral en esta ciudad (que son 40) y las 10 restantes se ubicarán en sitios de gran afluencia de personas, como Chapultepec, el Zócalo o el aeropuerto internacional.

Expresaron que para ello se solicitó a la Asamblea Legislativa que en el presupuesto del IEDF se incluya una partida para sufragar ese programa piloto, que sería lo único necesario, pues ya se cuenta con los elementos técnico-normativos para echarlo a andar.

Al explicar la forma en que funcionarán dichas urnas electrónicas, los consejeros expresaron que el día de los comicios (el 6 de julio del año próximo) la gente acudirá normalmente a emitir su sufragio a la mesa receptora de votos que le corresponda por ley y luego se podrá dirigir a las urnas electrónicas para dar su opinión sobre un tema determinado, que están por definir los integrantes del Consejo General del IEDF.

De acuerdo con los consejeros electorales, este adelanto tecnológico ya opera con éxito en varios países como Brasil, Venezuela, Perú, Puerto Rico y Estados Unidos, por lo que ahora se probará en la ciudad de México.

En su oportunidad, el director ejecutivo de Organización Electoral, Fernando Santos Madrigal, comentó que el costo que tiene cada una de las urnas va de 2 mil a 6 mil dólares, y añadió que ya se tienen ubicadas siete empresas que podrían proveer al IEDF de ese tipo de urnas.

El consejero Rubén Lara precisó que este proyecto "no surgió en el escritorio", sino que fue resultado de un intenso proceso de investigación llevado a cabo por el instituto, incluso antes de que concluyera el proceso electoral de 2000. "Lo que pretendemos es demostrar que no se requieren conocimientos informáticos o de otro idioma para poder utilizar estas urnas, por lo que no existe motivo alguno para tenerles miedo", añadió Lara, quien destacó que el uso de esta tecnología también disminuiría el costo de las votaciones y daría certeza al no existir el riesgo de que se "caiga" el sistema o se metan en él los hackers.

Durante la misma reunión, los consejeros anunciaron que a partir del próximo jueves iniciará un ciclo de conferencias sobre las experiencias del voto electrónico en Brasil y Estados Unidos, que se desarrollarán en el Tec de Monterrey campus ciudad de México.