Enriquecer el museo

Guanajuato, Gto., 6 de noviembre. El gobierno del estado de Guanajuato emitió a principios de año un decreto para convertir al Museo Iconográfico del Quijote en un ''órgano desconcentrado", lo que conllevaba el peligro de que ese legado cultural, fundado hace 15 años por el escritor y publicista Eulalio Ferrer, saliera de Guanajuato.

Lo que sucedió, comenta Ferrer en entrevista, ''es que hubo diferencias entre el texto del decreto y el contrato de donación, pero como el amor común a Guanajuato y el respeto a la obra de Cervantes y Don Quijote nos une a todos, aquella situación se arregló de manera satisfactoria.

''Ahora se tiene la idea de enriquecer la extensión del museo, con un proyecto que en cualquier momento se convertirá en realidad, que es la creación del Centro de Estudios Cervantinos, el cual tiene como base la biblioteca cervantina que dona la Fundación Cervantina de México, presidida por un servidor, con cerca de mil ejemplares singulares en su mayoría y de un alto valor económico, pues se incluyen viejas ediciones del Quijote. Es un acervo que resume, en cierto modo, las ediciones clásicas y las modernas, de manera que al poner en marcha el centro habrá una lectura visual que ofrece el museo y una literaria con la bibliografía, con lo que se redondea lo que yo llamó Guanajuato, capital cervantina de América."

En el acto oficial de inauguración del Coloquio Cervantino Internacional, que se realizó en el teatro Juárez, al que asistieron el gobernador Juan Carlos Romero Hicks, el rector de la Universidad de Guanajuato, Cuauhtémoc Ojeda Rodríguez y el director del museo, Alfonso Alcocer Martínez, entre otros funcionarios, Eulalio Ferrer, conmovido hasta las lágrimas, recordó cómo empezó a ''leer en voz alta" el Quijote en un campo de concentración en Francia, ''entre la miseria, la muerte, el terror y la esperanza". Situación que años después sería fuente de inspiración para fundar ese museo.

CARLOS PAUL, ENVIADO