Frustra a organizadores que el deporte no ha
podido trascender el conflicto diplomático
Se agotan recursos para que Cuba asista a los Centroamericanos
La única solución, que el presidente salvadoreño
convenza a Fidel Castro, dice Nelson Vargas La modificación a
la regla de cinco países mínimo por prueba, sólo si
la renuncia persiste: Muñoz
ABRIL DEL RIO
Tanto la comisión tripartita mexicana como dirigentes
del deporte centroamericano y del Caribe agotan instancias para que Cuba
asista a los juegos regionales de El Salvador 2002 y, aunque no fijaron
un plazo para lograrlo, consideraron como última opción modificar
la regla que exige la participación de cinco países por disciplina.
La
cuota mínima sería entonces de cuatro, pues de lo contrario,
advirtió Felipe Muñoz, titular del Comité Olímpico
Mexicano, "se corre el riesgo de que se cancelen más de la mitad
de las pruebas", de las 411 programadas para la justa, a realizarse del
23 de noviembre al 7 de diciembre.
"Hay una muy sencilla: Cuba podría asistir solamente
si el presidente de El Salvador (Francisco Flores) convence al presidente
Fidel Castro. Esa es la realidad; lo demás son puras especulaciones",
expresó Nelson Vargas, titular de la Comisión Nacional del
Deporte.
El dirigente, junto con Muñoz Kapamas y Fernando
Corona, este último jefe de la delegación mexicana, se reunieron
ayer para analizar el asunto y "cabildear", vía telefónica,
con los organizadores salvadoreños y otros responsables del deporte
del área.
Cuba, que ha ganado las últimas 18 ediciones de
los Juegos Centroamericanos, anunció que declinaba su participación
con el argumento de falta de seguridad a la que atletas, técnicos
y delegados estarían expuestos en El Salvador, país con el
que la isla rompió relaciones diplomáticas en 2000.
En entrevista radiofónica con Estadio W, el presidente
del Comité Olímpico Salvadoreño, José Benjamín
Ruiz, expresó que sumado a las pérdidas económicas
y la "frustración" que implica que el deporte no haya podido superar
el divorcio diplomático, "lo que quizá resentimos más
es que nos debieron haber dicho con tiempo, porque a estas alturas resulta
muy apresurado.
"Ahora tenemos que revisar logística y los cuadros
de competencia", señaló.
Ruiz destacó que resulta extraña la justificación
de Cuba, pues él mismo recibió hace tres semanas al coronel
Felipe Antonio Meza Zárate, comisionado del gobierno cubano, para
revisar la seguridad que se desplegaría en torno a los juegos.
"(Meza) se fue muy satisfecho de lo que aquí vio.
Platicó con el jefe de seguridad de la villa, con los altos jefes
de la policía nacional civil y se fue contento, por eso me sorprende
que ahora se ha puesto eso como pretexto".
Mencionó que en la negativa de Cuba "podría
haber problemas que nosotros desde nuestro ángulo deportivo y olímpico
ya no podemos alcanzar, pero en todo caso es político, y la política
no tiene por qué estarse metiendo en el ámbito deportivo,
porque se ha visto que la política lo desfigura todo.
"Creo que desde ese punto de vista no se lo va a agradecer
absolutamente nadie a Cuba, porque si por política estamos castigando
a la juventud deportiva de Centroamérica, no es justo", anotó
el dirigente, quien descartó manifestaciones relacionadas en El
Salvador.
Muñoz Kapamas, también tesorero de la Organización
Deportiva Centroamericana y del Caribe (Odecabe), indicó que hasta
el momento se han barajado diversas soluciones.
La modificación de cuatro y no cinco países
mínimo por deporte "es sólo una de las propuestas, porque
decidimos entre todos que primero hagamos todo lo posible porque se arregle
el problema entre Cuba y El Salvador", dijo.
No descartó que en algún momento pudiera
intervenir Mario Vázquez Raña "y el mismo Comité Olímpico
Internacional".