La iniciativa, para evitar el paso de terroristas,
inmigrantes y narcos
Legisladores estadunidenses piden a Bush militarizar
la frontera con México y Canadá
NOTIMEX
Washington, 8 de octubre. Legisladores estadunidenses
pidieron hoy al presidente George W. Bush el despliegue de militares en
la frontera con México y Canadá, para evitar la infiltración
de terroristas, inmigrantes y narcotraficantes. La solicitud, impulsada
por el polémico legislador de Colorado Tom Tancredo, está
apoyada en una petición ciudadana de 30 mil firmas en la que se
pide el uso temporal del ejército para "proteger" la integridad
territorial de Estados Unidos.
"Mientras nuestras fronteras permanezcan sin defensa,
no podemos decir que estamos haciendo lo suficiente para protegernos",
dijo Tancredo. Una iniciativa similar ha sido presentada y aprobada en
la Cámara de Representantes en los últimos cinco años,
pero rechazada en el Senado. Sus promotores esperan que los eventos del
11 de septiembre permitan por fin su aprobación por el Congreso.
Tancredo, quien preside la Comisión de Reforma
Migratoria y es un ardiente opositor de la inmigración ilegal, envió
a nombre del grupo una carta separada al presidente para que agencias federales
cooperen más en la detención de indocumentados.
La misiva pide en específico mayores fuerzas federales
para salvaguardar la frontera de incursiones de mexicanos ilegales,
así como de miembros de la policía y del Ejército
mexicanos, presuntamente ligados a tiroteos contra agentes estadunidenses.
Aunque la iniciativa no pide un número detallado
de tropas, Tancredo citó estimaciones de que se requieren al menos
unos 20 mil soldados para que el ejército ayude a las agencias de
la ley a detener inmigrantes, terrorristas y narcotraficantes.
Tancredo hace la petición en momentos en que es
centro de una tormenta política por su pretensión de buscar
la deportación del mexicano Jesús Apodaca, un joven de 18
años que declaró a un periódico ser indocumentado.
El caso de Apodaca captó la atención del
Denver Post porque el joven carecía de recursos para financiar
el costo de la universidad, a pesar de sus altas calificaciones. Al enterarse,
Tancredo pidió al Servicio de Inmigración y Naturalización
(SIN) deportarlo de Estados Unidos. El SIN ha dado signos de que no atenderá
la solicitud en el corto plazo.
En su nueva carta a Bush, el legislador apremia al presidente
para que ordene al SIN cooperar plenamente con funcionarios estatales y
locales en la detención de inmigrantes.
El hecho de que Tancredo anunciara la petición
a menos de un mes de las elecciones del 5 de noviembre y en medio del debate
congresional sobre Irak, fue visto aquí como un intento más
de ligar la migración con la seguridad nacional.