La falta de consensos sobre reformas afectará la creación de empleos, advirtió
BdeM: desacuerdos obstaculizan la inversión
Visualiza como riesgos para México un menor crecimiento de EU y depreciación del dólar
JUAN ANTONIO ZUÑIGA
En las actuales circunstancias "resulta de importancia clave lograr prontos consensos que permitan acelerar el proceso de modernización económica" del país, o de otra manera "la prolongación de desacuerdos a nivel político" entorpecería el flujo de la inversión nacional y extranjera, e induciría a una mayor volatilidad de las tasas de interés y del tipo de cambio, advirtió ayer el Banco de México (BdeM).
Al dar a conocer su informe sobre la política monetaria seguida durante el primer semestre del año, el banco central insistió en que la falta de acuerdos políticos sobre las "reformas estructurales pendientes" afectarían las perspectivas de crecimiento económico y en consecuencia se perjudicarían los incrementos de la productividad, la creación de empleos y la mejoría del salario real.
En el balance de riesgos para el desempeño de la inflación y de la economía mexicana en lo que resta de 2002, el Banco de México identificó, en el ámbito externo, un crecimiento económico más bajo de la economía estadunidense respecto a su escenario base (2.7 por ciento); una mayor depreciación del dólar respecto al euro, y "que ocurriera una importante contracción adicional de los flujos de capital a los mercados emergentes".
Respecto a los principales riesgos internos, el banco central enumeró, en primer termino, que la depreciación del peso frente al dólar influya en los precios, las expectativas de inflación y las negociaciones salariales. Y, en segundo lugar, una expectativa de expansión económica menor de mediano plazo, causada "por una percepción desfavorable sobre el futuro de la agenda de reforma estructural y por la tensión política que ha llevado a la falta de acuerdos".
El informe, que evalúa las medidas adoptadas por el Banco de México y el entorno en que se dispusieron durante la primera mitad del año, indica que de presentarse un mayor impacto de la depreciación del tipo de cambio en los precios, "sería necesaria una política monetaria más restrictiva para alcanzar las metas propuestas".
Esta restricción ya se dio con la ampliación del corto de 300 a 400 millones de pesos, el pasado 23 de septiembre.
El banco central explica que, aun cuando durante primeros seis meses del año se detectó una modesta mejoría de las condiciones prevalecientes en el mercado laboral, "el aumento del empleo formal resultó insuficiente para proporcionar fuentes de trabajo para los nuevos aspirantes", por lo que, "es de suponerse, un gran número de personas pasó a formar parte del sector informal" de la economía.
Señala que el incremento en la productividad en la industria manufacturera, "resultó más que suficiente para compensar el alza que experimentaron los salarios reales", aunque esto no ocurrió -precisó- en la industria maquiladora y en el sector comercio, por lo cual "los costos unitarios crecieron".
Apuntó que el crecimiento nominal de los salarios contractuales disminuyó a entre 5.8 y 6.5 por ciento, pero esas tasas "son todavía elevadas dada la holgura prevaleciente en el mercado laboral", lo cual "ha eliminado la recuperación de la ocupación".