Quedaron sepultadas bajo un fragmento del glaciar Maili
Casi imposible, rescatar con vida a 160 personas en Osetia del Norte
JUAN PABLO DUCH CORRESPONSAL
Moscu, 23 de septiembre. Tres días después de ocurrida la tragedia, es ya ínfima la probabilidad de rescatar aún con vida a las más de 160 personas que quedaron literalmente sepultadas bajo el enorme fragmento del glaciar Maili que se desprendió en el desfiladero de Karmadón, en la región caucasiana de Osetia del Norte.
Los servicios de socorro, cuando empezaba a cundir el desánimo, encontraron este lunes a un hombre de 66 años, en estado muy grave. Aunque es la única buena noticia del día, no pierden la esperanza de que pueda haber otros sobrevivientes.
A partir del registro de habitantes de las aldeas cercanas, 113 personas fueron declaradas oficialmente desaparecidas y se teme que el número de víctimas sea mayor porque mucha gente acostumbraba acampar los fines de semana en la zona afectada, cercana a Vladikavkaz, la capital regional.
Entre los desaparecidos figuran 49 de los 58 miembros de un equipo de filmación encabezado por el popular director y actor Serguei Bodrov, que filmaba una película de guerra ambientada en la vecina Chechenia.
Boris Dzgoev, coordinador de las labores de rescate, desmintió la versión atribuida a fuentes del Ministerio del Interior de Osetia del Norte que mencionaba como posible causa del alud el uso de explosivos durante el rodaje.
Varios expertos, en declaraciones a la televisión local, coincidieron en descartar que los efectos pirotécnicos hayan podido ocasionar un desastre de tal magnitud: la masa de hielo, rocas y lodo que dejó el alud, al arrasar todo a una velocidad equivalente a 100 kilómetros por hora, cubrió una franja de entre 300 y 400 metros de ancho, a lo largo de 16 kilómetros.
Dicha masa tiene un mínimo de 40 metros a un máximo de 200 metros de grosor, lo cual dificulta en extremo las labores de búsqueda y rescate. Algo similar ocurrió en 1902 y 1969, en la misma zona del actual desprendimiento del glaciar y con resultados también devastadores.
Hacia la noche de este lunes, se pudieron recuperar sólo siete cuerpos. Junto con los 17 habitantes de la aldea de Nizhny Karmadon, cubierta por cerca de 100 metros de hielo y lodo, se eleva a 24 el número reconocido de muertos.
El repentino aumento de la temperatura comienza a ser un grave problema adicional. Por lo pronto, se formaron dos lagos de unos 150 por 150 metros cada uno, que contienen no menos de 20 millones de metros cúbicos de agua. Ante el creciente riesgo de que se inunde una vasta zona, se ordenó desalojar a los habitantes de las aldeas cercanas.