Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 14 de septiembre de 2002
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Economía
Tendría efectos nocivos debido a la estrecha relación con el país del norte

Dudan analistas de la fortaleza económica de México ante un posible ataque de EU a Irak

Prevé el gobierno salir de la recesión este año y culminar 2002 con PIB de 1.7%

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

La creciente posibilidad de un ataque militar de Estados Unidos a Irak aumentó las dudas entre analistas sobre la fortaleza de la economía mexicana, que apenas comenzó a salir de una recesión de 15 meses.

"En las circunstancias actuales es posible que una guerra tenga efectos nocivos sobre la evolución de la economía mexicana, debido principalmente a la estrecha relación que guarda con la de Estados Unidos", comentó Rodolfo Navarrete, director de Análisis de la Casa de Bolsa Vector.

El gobierno mexicano, que ha respaldado la política de Estados Unidos en Medio Oriente después del 11 de septiembre de 2001, espera que la economía logre salir definitivamente de la recesión este año. El jueves pasado, el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, consideró que el Producto Interno Bruto (PIB), que en 2001 registró una contracción de 0.3 por ciento, aumente 1.7 por ciento este año y mantenga una tendencia al alza en 2003.

La economía de México depende en gran medida de la evolución de Estados Unidos, país al que destina 85 por ciento de sus ventas externas. En la eventualidad de un ataque militar de Washington a Irak, como parte de la estrategia de la Casa Blanca contra el terrorismo, la actividad económica de México podría verse parcialmente beneficiada por mayores precios del petróleo y unos mejores términos de intercambio, pero ese beneficio sería disminuido por una contracción de la economía estadunidense, a decir de analistas.

Rodolfo Navarrete comentó que la posibilidad de una guerra entre Estados Unidos e Irak se ha venido incrementando de manera importante en los días recientes. Por ello, dijo, también ha tomado fuerza la inquietud sobre los efectos que podría tener este acontecimiento sobre la evolución futura de la economía mexicana, "sobre todo si se toma en cuenta que esta guerra podría ser muy diferente a la librada (por Estados Unidos) en Afganistán" después de los ataques del 11 de septiembre.

El especialista de la Casa de Bolsa Vector llamó la atención sobre el hecho de que el ejército de Irak está mejor equipado que el del régimen que gobernaba Afganistán hasta el año pasado. Por ello, la guerra de Washington contra Bagdad podría ser más prolongada que la campaña contra Afganistán.

"Otro factor es que Irak es un país exportador de petróleo -aporta 15 por ciento de la producción mundial- por lo que un ataque de Estados Unidos podría afectar el precio mundial del energético y más aún si se considera que Irak cuenta con el apoyo de los países árabes, los principales exportadores de crudo en el mundo", apuntó.

Así, un efecto inmediato de un ataque a Irak provocaría un "fuerte incremento" de las cotizaciones internacionales del petróleo. Por otro lado, se esperaría un efecto importante en los mercados financieros, en vista de que es probable que los inversionistas empiecen a buscar refugio en activos más seguros, comentó el especialista. Esto significaría una disminución en el flujo de inversión a naciones en desarrollo.

"Si llegaran a presentarse estos eventos es probable que la actividad económica estadunidense empiece a mostrar signos de contracción", consideró Rodolfo Navarrete.

Añadió que "definitivamente, un factor que podría contrarrestar la contracción de la economía estadunidense podría ser el dinamismo que registrarían las industrias relacionadas con la guerra, pero al menos al principio esto podría tener un efecto limitado".

En lo que se refiere a México, señaló que el incremento en los precios internacionales del petróleo favorecería el saldo de la balanza comercial y la situación financiera del gobierno -por mayores ingresos a los previstos. También beneficiaría a la economía misma, toda vez que mejorarían los términos de intercambio con el exterior, por lo que con la misma cantidad exportada el país podría comprar una mayor cantidad de importaciones.

Pero, explicó, en una situación de guerra contra Irak, al menos al principio sería de esperarse una posible desaceleración en la economía estadunidense, que afectaría las exportaciones mexicanas "y por tanto el dinamismo de la economía en su conjunto".

Añadió que esta situación podría verse agravada si se considera posible que disminuya la inversión extranjera a México, debido a que el capital estarían dirigiéndose a buscar refugios más seguros.

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