Fue planeado con anticipación, revelan investigaciones del concejo de Flores Magón

Autoridades autónomas confirman que en Amaytik se realizó un ataque paramilitar

Sostienen que Seguridad Pública estaba enterada del plan y protege a los agresores

HERMANN BELLINGHAUSEN ENVIADO

San Cristobal de Las Casas, Chis., 30 de agosto. El concejo autónomo del municipio Ricardo Flores Magón difundió anoche el resultado de sus investigaciones en relación con el que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) ha llamado "caso Amaytik", donde perdieron la vida dos representantes autónomos durante un ataque paramilitar.

El informe refiere que el 21 de agosto el concejo autónomo envió a la ranchería Amaytik un citatorio a las familias Hernández Gutiérrez y Gutiérrez Espinosa "para buscarle solución al problema de que Juana Hernández Cruz contrajo matrimonio con Manuel Gutiérrez Hernández (y éste) abandonó a su esposa". Las autoridades fijaron la cita para el 25 de agosto en la escuela autónoma del lugar.

Cuando el grupo de priístas de Amaytik se enteró de que las autoridades autónomas llegarían a la comunidad "realizaron varias reuniones extraordinarias después de las seis de la tarde, y varios de los priístas de esa ranchería viajaron a las comunidades de Peña Limonar y Cuauhtémoc, donde se reunieron con paramilitares de la OPDIC. En dichas reuniones y entrevistas, estos paramilitares planearon el ataque en contra las autoridades autónomas".

El concejo de Flores Magón informa que su vocal, Lorenzo Martínez Espinosa, llegó a la ranchería Amaytik y se reunió en la escuela autónoma con el agente autónomo Jacinto Hernández Gutiérrez. "En el lugar ya se encontraba la familia de Juana Hernández Cruz", agrega.

"Cuando los paramilitares detectaron la llegada de las autoridades iniciaron el primer movimiento, y llegó a las afueras de la escuela autónoma un grupo de 20 paramilitares, entre los que iban el señor Domingo Gutiérrez Espinosa, padre del marido huido, y Santiago Hernández Pérez, agente auxiliar priísta. Este grupo empezó a insultar a las autoridades autónomas; exigieron que su agente estuviera en la solución del problema y determinaron que Domingo no entraría a la reunión hasta que le tocara dar su palabra."

La saña de los agresores

Las autoridades autónomas, dice la versión del concejo, "aguantaron los insultos y aceptaron las exigencias de los priístas para darle solución al problema. El grupo de priístas permaneció afuera de la escuela junto a Domingo Gutiérrez. En ese momento empezó una segunda movilización de paramilitares; en algunas casas se empezaron a dar avisos. La reunión continuó durante una hora y Lorenzo salió de la escuela para pedirle a Domingo que entrara a dar su parte. Cuando Lorenzo salió el grupo de 20 paramilitares lo agarró y lo comenzaron a golpear".

Siete bases de apoyo zapatistas que se encontraban cerca del lugar y se dieron cuenta "intentaron auxiliar a Lorenzo, pero un nuevo grupo de 10 paramilitares apareció armado con palos y escopeta y se unieron al grupo que ya estaba en la escuela. Cuando el agente autónomo salió para ayudar a Lorenzo también lo agarraron".

Jacinto Hernández Gutiérrez fue sujetado por Gaspar Hernández Pérez y por Jacinto Hernández Pérez, agrega el informe. "Cuando ya lo tenían inmovilizado, el agente priísta Santiago Hernández Pérez le dio un garrotazo en la cabeza, que lo dejó inconsciente en el momento y le provocaría la muerte media hora más tarde. El ataque a golpes siguió hasta que algunas bases de apoyo lograron quitar algunos garrotes y golpearon a los paramilitares para sacar el cuerpo de Jacinto hasta su solar, donde ya no se recuperó".

El otro agredido "no pudo salir de entre los paramilitares". Camilo Hernández Vallinas (el segundo "testigo" que el procurador Herrán Salvatti entrevistó en Tabasco), Alfredo Hernández Vallinas y Nicolás Hernández Pérez (el herido y primer "testigo" oficial) "sujetaron a Lorenzo para que, a menos de tres metros, Jacinto Hernández Vallinas apuntara su escopeta calibre .16 y detonara una descarga en el pecho de Lorenzo, quien inmediatamente cayó muerto. El mismo disparo de escopeta hirió a uno de los paramilitares que sujetaba a Lorenzo". (Cabe señalar que esa esquirla -"posta", la llamó en algún momento la Policía Judicial- en el cuerpo de Nicolás Hernández, sirvió a la PGJE para propalar que estaba herido "con arma de fuego", si bien el informe médico del nosocomio tabasqueño donde lo atienden se centra en los golpes contusos del aludido, pues la "herida de bala" carece de importancia médica. Pero sirve para dar a creer que los autónomos "dispararon").

El "asesor" que llegó a Palenque

"Una vez que los paramilitares cumplieron su objetivo, asesinando a las autoridades autónomas, salieron de lugar y prepararon a sus familias para desalojar la comunidad. Veinte minutos más tarde llegó la Seguridad Publica acantonada en Peña Limonar, levantaron el cuerpo de Lorenzo y cubrieron la retirada de los paramilitares, quienes se refugiaron en Peña Limonar. La misma Seguridad Publica permitió y cubrió la salida de los paramilitares heridos a la ciudad de Palenque para que recibieran atención médica", prosigue el concejo autónomo.

Según reportes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro (Prodeh), que coinciden al respecto con los autónomos, en la ciudad de Palenque los agresores heridos se hicieron pasar como "sociedad civil", e incluso como "Organización Yomblej" o "Xi'Nich" (tres designaciones que corresponden a grupos afines a los zapatistas, y que al parecer no tienen presencia en Amaytik).

Sin sacar conclusiones, los visitadores del Prodeh llaman la atención sobre la confusión y los titubeos de estas personas al expresar su filiación política, antes de que fueran interrogados por el Ministerio Público. (Posteriormente, quizá conociendo mejor el guión que estaban representando, los declarantes priístas se autodenominaron "sociedad civil", y punto. La PGJE les creyó, por supuesto).

Este grupo contaba en Palenque, dice el concejo de Flores Magón, con la asesoría de la OPDIC, a través de Ricardo Díaz Demesa, "quien fue enviado por la organización priísta para 'asesorar' a la 'sociedad civil' asesina. Los paramilitares dijeron que fueron atacados por más de 30 zapatistas armados y que los mismos zapatistas habían matado a sus compañeros. Cosas que son totalmente falsas".

El dirigente de la organización de Yomblej (de filiación perredista) declaró posteriormente, tanto a los zapatistas como a los visitadores del Prodh, desconocer a esas personas, y se manifestó contra los crímenes.

El día 27, "después de que se presionó a los malos gobiernos para que entregaran el cuerpo de nuestro compañero Lorenzo, la Seguridad Pública procedente de Ocosingo dejó el cuerpo de Lorenzo en la comunidad de Nueva Esperanza. El cuerpo fue destapado en presencia de organizaciones de derechos humanos, donde se comprobó que el disparo de escopeta en el pecho le quitó la vida. El cuerpo fue entregado por la Seguridad Publica en un estado indigno". Le habían realizado la autopsia, y las autoridades lo entregaron "muy maltratado, desnudo y en estado de putrefacción".

Ante los resultados de su investigación, el concejo de Flores Magón declara que lo ocurrido en Amaytik "no se trató de un enfrentamiento, fue un ataque paramilitar en contra de las autoridades autónomas, planeado con anticipación y asesorado por paramilitares de la OPDIC que desde hace tiempo mantienen reuniones con los grupos que estaban en contra del municipio autónomo".

Todo indica, según los autónomos, que la Seguridad Publica destacada en Peña Limonar "estaba enterada del ataque, cubrió el retiro de los paramilitares y hoy les da protección" (Y aquí surgen algunas dudas: si la policía llegó a Amaytik 20 minutos después, recogió el cadáver de Lorenzo sin testigos, y éste ya se encontraba en Ocosingo a las primeras horas de la tarde del mismo día, a cinco o seis horas de camino de la ranchería, ¿a qué horas llegó el Ministerio Público de la cabecera municipal, realizó la diligencias y retornó a sus oficinas en Ocosingo? Dicho de otro modo, hasta ahora nada prueba que el MP haya realizado el levantamiento del cadáver. Igual ocurrió en la comunidad 6 de Agosto el pasado día 7, el MP de Altamirano nunca llegó, y eso que la distancia entre sus oficinas y el lugar de los hechos eran menor de 5 kilómetros, la mitad de ellos por carretera).

El concejo autónomo relaciona el ataque con las agresiones recientes de la OPDIC, "que tienen como objetivo asesinar a las autoridades del municipio autónomo y a las autoridades del EZLN". Ante esto responsabiliza "a los gobiernos estatal y federal de utilizar a los grupos paramilitares como estrategia contrainsurgente y, por lo tanto, son responsables de estas muertes".