El PRI "ya no será cómplice de políticas públicas que empobrecen al país": Madrazo
No descarta Heladio Ramírez que los cenecistas recurran a "los machetes" para defender el agro
Presente en congreso de la CNC, Ricardo Monreal pide a militantes que abandonen el tricolor
MATILDE PEREZ U. ENVIADA
Matamoros, Tamps., 26 de agosto. El líder de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Heladio Ramírez López, advirtió que el "fantasma de la ingobernabilidad y la violencia recorre" las regiones rurales, ya que la política, instrumento central de la conducción social, sucumbió ante el pragmatismo del mercado. No descartó la posibilidad de que los integrantes de la organización recurran a "los machetes" para no desaparecer como sector productivo.
Ante unos 5 mil delegados cenecistas de 29 estados que participan en el 24 Congreso Nacional Extraordinario, el ex gobernador de Oaxaca aseguró que los campesinos se sacudirán inercias y actitudes pasivas para demostrar a los gobernantes que mercado y democracia son caminos diferentes.
"Hay quienes piensan que los conflictos de política, economía y sociedad se arreglan solos", la CNC -asentó- luchará por las definiciones políticas que aseguren a los campesinos que prevalecerá el interés nacional por encima de cualquier otra consideración.
Los campesinos -aseveró- "no aceptaremos más largas ni dudas y menos actitudes entreguistas; tampoco seremos pasivos frente al Tratado de Libre Comercio de América del Norte ni frente a los conflictos por la tierra y a los inmensos riesgos que surgen por el achicamiento del Estado". La CNC, puntualizó, en ese proceso de cambio está abierto a las alianzas con quienes compartan sus objetivos.
Dirigiéndose al presidente del PRI, Roberto Madrazo Pintado; a los coordinadores de ese partido en el Senado, Enrique Jackson Ramírez, y en la Cámara de Diputados, Rafael Rodríguez Barrera, y a la presidenta de la mesa directiva en ese recinto, Beatriz Paredes Rangel, el dirigente campesino puntualizó que la alianza con el PRI ya no será de subordinación y exigió que la actual dirigencia reconstruya y fortalezca su unidad y enarbole las demandas de los más pobres.
El gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, instó al gobierno federal aplicar una política integral para devolver al sector agropecuario su carácter medular, ya que de eso depende la estabilidad y crecimiento del país. "El blindaje agroalimentario que anunció el gobierno federal tiene que traducirse en acciones reales, trato justo y protección a los campesinos."
Los coordinadores del PRI en el Congreso de la Unión se comprometieron a evitar que sigan asignándose bajos presupuestos al campo.
Jackson y Rodríguez Barrera afirmaron a los campesinos que desde el Congreso pugnarán por la aprobación de leyes que frenen la competencia desleal en el comercio con otros países; que en la disputa por el agua con Estados Unidos ganen los productores mexicanos; tarifas eléctricas que no afecten la economía campesina, y el establecimiento de una nueva institución financiera que entregue créditos oportunos y baratos a los productores.
Madrazo Pintado dijo que el PRI luchará por una agenda social, porque "llegó la hora de pagar la deuda histórica con el campo; ya no será cómplice de las políticas públicas que siguen empobreciendo al país. No vamos a esperar más promesas de un gobierno que no tiene vocación ni herencia histórica para buscar la justeza social". Pero pidió a los campesinos respalden a ese partido en las elecciones federales de 2003.
Entre los asistentes al congreso cenecista estuvo el gobernador de Zacatecas, Ricardo Monreal Avila, quien comentó que propondría a los cenecistas y al Congreso Agrario Permanente una unidad al "margen de cualquier militancia política, porque los problemas del campo no tienen partido, que conjuntemos fuerzas para lograr un presupuesto para combatir la pobreza en el campo. Vengo", abundó el gobernante perredista, "a convencer a los cenecistas de que se salgan del PRI y sean una organización plural e independiente, ya que la CNC surgió de la izquierda, pero se ha retorcido profundamente a la derecha".
En el foro El problema agrario de México, los delegados y dirigentes de las ligas agrarias de la CNC alzaron la voz ante la secretaria de la Reforma Agraria, María Teresa Herrera Tello, y el presidente del Tribunal Superior Agrario, Ricardo García Villalobos, al exponer los problemas por conflictos de límites, despojos, sobreposición de tierras, decisiones precipitadas de los tribunales agrarios que han motivado enfrentamientos entre campesinos y expropiaciones de tierras que después de 40 años no se han pagado. "Quiero que escuche mi problema... es un asunto muy delicado... el juicio agrario está provocando enfrentamientos...", explicaban campesinos de los estados.
El diálogo con las autoridades agrarias casi se convirtió en abierta confrontación al anunciarse el retiro de Herrera Tello. "ƑPara qué viene si no va a escucharnos?", preguntaron varios campesinos, quienes rodearon el presídium, intentando entregar escritos o bien que la funcionaria los escuchara.
En encuentro se tensó; luego de un discreto telefonema llegó el dirigente cenecista Heladio Ramírez, quien pidió a la titular de la SRA terminar con engaños y promesas incumplidas. "El lenguaje tiene que cambiar, los campesinos están muy agraviados y sentidos porque hay regiones donde la gente de la Procuraduría Agraria en lugar de conciliar divide y confronta a las comunidades, incluso en asuntos que están a punto de resolverse. El asunto de la tierra es un problema muy serio que requiere atención."
Herrera escuchó a los campesinos y antes de retirarse afirmó que es "sensible a los conflictos agrarios; me indigna que haya tantos asuntos sin resolverse y que muchos hayan significado la pérdida de vidas". Se comprometió a instalar mesas de trabajo estatales y regionales para atender todos los asuntos.