La compañía de copiado más
grande del mundo aceptó haber manipulado cuentas
Xerox infló ganancias por 2 mil mdd
La falsedad de cifras se ubicó principalmente
en sus operaciones para América Latina
Desplome de acciones en Nueva York; Merrill Lynch
cambió la recomendación a vende
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington y Nueva York, 28 de junio. Xerox Corporation,
la productora más grande de copiadoras del mundo, anunció
hoy que había inflado sus ganancias por 1.9 mil millones
de dólares, y se sumó así a una creciente lista de
empresas estadunidenses que han exagerado y manipulado, o incluso falseado,
sus cuentas financieras.
La empresa, con sede en Stamford, Connecticut, reconoció
que había registrado ganancias aún no recibidas en sus cuentas
financieras durante varios años, y como resultado tuvo que reclasificar
estas cuentas, que en su conjunto involucran más de 6 mil millones
de dólares en ganancias. El problema de contabilidad se ubicó
principalmente en las cuentas para las operaciones en América Latina
de Xerox, informó un vocero de la empresa.
El
anuncio provocó un desplome en el valor de sus acciones en la bolsa
de Nueva York, y la gigantesca correduría Merrill Lynch informó
que había cambiado su recomendación de las acciones de Xerox
de "neutral" a "vende".
La confesión de estos errores se produjo menos
de dos meses después de que Xerox había pagado una multa
de 10 millones de dólares a la Comisión de Valores, la agencia
gubernamental que regula el mercado bursátil, por faltas de contabilidad.
La Comisión afirmó que la multa ?la más grande jamás
pagada por una empresa por violaciones en sus informes financieros? era
apropiada por la magnitud del engaño a los inversionistas.
En abril, la comisión afirmó también
que mientras ejecutivos de la empresa ganaban millones de dólares
en bonos y ventas de sus acciones particulares basados en cifras infladas
de las ganancias de la empresa, Xerox había despedido a su auditor
después de que había objetado sus prácticas de contabilidad.
Por su parte, la ejecutiva en jefa y presidenta de Xerox,
Anne M. Mulcahy, declaró este viernes que "Xerox hoy cierra un capítulo
difícil en la historia de la empresa y estamos firmemente resueltos
a asegurar la integridad más alta a los informes financieros de
la compañía".
El reconocimiento de Xerox de que había presentado
mal más de 6 mil millones en ingresos, nutrirá más
la creciente ola de críticas contra el modelo empresarial estadunidense.
"La pérdida de fe por parte de los inversionistas estadunidenses
y extranjeros en los libros de contabilidad empresariales de Estados Unidos
está agitando a los mercados financieros globales", reportó
hoy The Wall Street Journal.
"Si, como resultado, el flujo de capital extranjero a
Estados Unidos se interrumpe, la economía mundial podría
ponerse en riesgo, ya que Estados Unidos depende de dinero del exterior."
Eso es lo que ya está ocurriendo, según
Jeff Faux, presidente del Instituto de Política Económica
en Washington. "Con la credibilidad de la contabilidad corporativa de Estados
Unidos minada por el escándalo y con la perspectiva poco probable
de un crecimiento del mercado de acciones en el corto plazo, los inversionistas
extranjeros se están volviendo cada vez menos propensos a continuar
bombeando dinero hacia Estados Unidos", afirmó.
Por ejemplo, la firma de inversiones Allianz Dresdner
Asset Management anunció esta semana que estaba aconsejando a sus
clientes sacar dinero de Estados Unidos e invertirlo en Europa y otras
partes del mundo.
Uno de los problemas básicos que se ha manifestado
con la creciente crisis empresarial en Estados Unidos es que los ejecutivos
empresariales aquí operan sobre la teoría de que "un precio
creciente de las acciones justificaba casi cualquier comportamiento", explicó
Jeffrey Pfeffer, profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad de
Stamford.
En declaraciones al Washington Post, agregó
que "hasta que la gente se dé cuenta de que los mercados de capital
no son tan eficientes y del todo conocedores como todos suponían,
de que las empresas tienen que ser administradas para los clientes y los
empleados y no sólo para los inversionistas, que gente que despoja
a inversionistas debería ser tratada de la misma manera que gente
que asalta a un banco; hasta entonces, no creo que las cosas en verdad
cambiarán mucho".