Pondera el jurado su permanente atención a las literaturas mexicana y universal
Reconocen a Eduardo Lizalde con el premio de poesía López Velarde
El poeta jerezano, el primero que me conmovió, dice el autor de El tigre en la casa
Recoger su vasta y admirable obra prosística es una labor pendiente, apremia
ANASELLA ACOSTA NIETO
El poeta Eduardo Lizalde (Distrito Federal, 1929) fue reconocido con el Premio Iberoamericano de Poesía Ramón López Velarde 2002.
Durante el anuncio de las Jornadas Lopezvelardeanas, el Instituto Zacatecano de Cultura informó que el jurado integrado por Marco Antonio Campos, Francisco Serrano, Víctor Sandoval, Vicente Quirarte y José de Jesús Sampedro eligió al autor de El tigre en la casa ''por ser un gran poeta, un gran lector, un tipo siempre atento a la literatura mexicana y universal, a lo que escriben los poetas de provincia y los jóvenes. Siempre con una generosidad notable en sus juicios", manifestó Campos.
Presente durante el anuncio, Lizalde agradeció la distinción por parte del ''grupo de amigos y de poetas talentosos" de su generación, así como la presencia de Hugo Gutiérrez Vega, quien le entregó la estafeta del premio que recibió el año pasado.
''Estoy marcado desde la infancia por López Velarde, el primer poeta que verdaderamente me conmovió de manera estética cuando tenía 14 o 15 años", manifestó.
Lenguaje concentrado y abstracto
El también Premio Nacional de Literatura y Lingüística 1988 compartió una anécdota en la que un amigo le señaló: fíjate de qué manera, con materiales verdaderamente de consumo común, puedes construir poemas conmovedores; simplemente transmitiendo los consejos y chismes de un pequeño barrio jerezano (en referencia a la tierra natal del autor de Suave Patria).
Y recitaba de López Velarde: ''Me contó el campanero esta mañana/ que Juan es novio de una prima hermana/ rica y hermosa, que murió, Susana/ que el año viene bien para los trigos/ el campanero y yo somos amigos".
Luego del anuncio de las jornadas en honor de López Velarde, que se realizarán en Zacatecas y concluirán en el Distrito Federal, Lizalde expresó en entrevista que su interés actual en la obra del autor de La sangre devota radica en la recuperación del material periodístico y prosístico, del que, precisa, hay una enorme pérdida. Por ejemplo, asevera: ''Es extraño que el más grande fenómeno del teatro y de la ópera en 1919, que era (Enrico) Caruso, no haya sido visto ni comentado por López Velarde. No hemos podido localizar el artículo al respecto. Falta mucho por recoger de la inmensa, admirable y vasta obra de López Velarde como prosista".
Agregó que la poesía del zacatecano es más compleja, extraña y misteriosa de lo que suponen los lectores superficiales de su obra, los que se dejan llevar por el sonido o por los versos conocidos de la Suave Patria, obra que se publica después de la muerte del autor. Poema que -explica Lizalde- tampoco se sabe leer, porque no se debe recitar o declamar para ''echarse a perder en los escenarios escolares como suele ocurrir; debe leerse, decirse".
Precisó que la poesía utiliza un lenguaje concentrado, abstracto, muy complejo, difícil de ser captado por el gran público que, sobre todo, se deja llevar por la atracción de la anécdota, de los personajes, del desarrollo argumental de las novelas, de los paisajes de la época. Pero esto no quiere decir que la novela sea fácil de leer, lo que sucede es que el público también lee la cáscara de la novela, la parte superficial, no entiende las virtudes estéticas literarias, prosísticas, poéticas de los grandes autores; así que tanto la novela como la poesía son dificilísimas de captar, pero la novela sí tiene asideros y ventajas mucho más grandes para el público general, como el cine o la telenovela.
Poesía saludable
-Entonces, Ƒla gran literatura no está hecha para las mayorías?
-No, claro que no. El gran arte y la gran ciencia no están hechos para las mayorías, aunque suene elitista. Son especialidades. Es tan difícil hacer poesía como practicar la antropología o la ciencia matemática. La poesía requiere de una formación y capacidades grandes, además de genio, porque a las personas les puedes enseñar a manejar una computadora, pero no a hacer un poema. Si no se tienen las dotes, así el alumno tenga una formación cultural extraordinaria, estará incapacitado para hacer un poema o una novela importante.
-ƑCuál es la circunstancia por la que atraviesa la poesía mexicana?
-La poesía está en excelentes condiciones de salud, más que la prosa, incluso. Es mucho más brillante la trayectoria de la poesía mexicana desde Sor Juana hasta los días que corren, que la narrativa, que es mucho más reciente.
''Sin olvidar a los formidables narradores mexicanos. Pero poetas hemos tenido desde finales del siglo XIX y principios del XX, empezando por Manuel José Othón, Salvador Díaz Mirón, José Juan Tablada, Ramón López Velarde, la generación de los Contemporáneos, la de Octavio Paz, Efraín Huerta, Alí Chumacero y, más cerca, Jaime Sabines.
''Es un ejército de grandes poetas extraordinarios. Por ello ser llamado buen poeta en México es un elogio muy grande en un país de grandes poetas.''