Presión sobre el Congreso para que apruebe leyes pedidas por el órgano financiero
No hay "plan B" para Argentina; o cumplimos con las exigencias del FMI o me voy: Duhalde
Europa negociará con nosotros hasta que haya un acuerdo con el fondo, dice canciller
AFP Y REUTERS
Buenos Aires, 22 de mayo. El gobierno argentino redobló la presión al Congreso para que se aprueben las leyes exigidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), con la amenaza de renuncia del presidente Eduardo Duhalde: "el único camino que tiene el gobierno es cerrar el acuerdo con el FMI, no hay plan B, no hay de otra. Seguimos por esta vía o me voy", advirtió a los principales dirigentes de su Partido Justicialista (peronista) y de su aliado legislativo, la Unión Cívica Radical, según una alta fuente gubernamental citada por Afp.
Según la fuente, Duhalde habría logrado con su amenaza el compromiso de cerrar filas para modificar una ley como lo exige el FMI.
Esta versión se conoce el mismo día en que el mandatario enfrentó el primer paro convocado por una central obrera peronista contra su política económica y en rechazo al FMI. Además, se informó que dos fiscales federales argentinos hicieron lugar a un pedido de investigación presentado por dos abogados que buscan se determine si Paul O'Neill y John Taylor, secretario y subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, respectivamente, y el director de Operaciones Especiales del FMI, Anoop Singh, propiciaron la sanción de medidas contrarias a "intereses básicos de la república" para obtener la sanción de leyes en favor de determinados sectores económicos y financieros.
Si se modifica la Ley de Subversión Económica no se podrá juzgar a los banqueros y responsables del colapso financiero que ha hundido al país. La reciente modificación de la Ley de Quiebras, como exigía también el organismo financiero, deja el campo libre para que poderosos acreedores se queden con activos de las deterioradas empresas locales como pago de deuda.
La presión del gobierno, que hoy confirmó que permanecerá en el cargo el presidente del Banco Central, el ex funcionario del FMI Mario Blejer, también se dio por medio del canciller Carlos Ruckauf. Al llegar a Buenos Aires de una gira por Italia y España, éste advirtió que "Argentina tiene que cumplir con los requisitos del FMI tanto si quiere acceder a políticas crediticias -y esto es muy importante y delicado- como para avanzar en políticas comerciales". Precisó en este sentido que los países europeos sólo comenzarán negociaciones con Argentina después que se firme un acuerdo con el FMI.
La modificación a la Ley de Subversión Económica se encuentra trabada en el Congreso, mientras sólo siete de 24 provincias suscribieron hasta ahora el acuerdo con el Estado federal para reducir su déficit fiscal en 60 por ciento, como pide también el FMI.
"No podemos andar mendigando como gusanos por el mundo para conseguir un mendrugo que no nos van a dar", advirtió hoy Hugo Moyano, líder del ala disidente de la oficialista Confederación General del Trabajo, al hablar en la céntrica Plaza de Mayo ante unos diez mil trabajadores.
Paro de disidentes de la CGT
La CGT disidente, que reúne a unos 3.5 millones de afiliados, frente a unos 5 millones del ala oficialista, realizó este día el primer paro de una central peronista contra Duhalde. La huelga de 12 horas no tuvo fuerte incidencia, ya que esta vez no paró el gremio de transporte de pasajeros, y el punto fuerte estuvo en la concentración frente a la casa de gobierno.
Quienes gobiernan "no tienen el coraje suficiente para poner al país de pie, porque si asumieran una causa nacional y popular este pueblo los estaría acompañando", denunció Moyano.
El reclamo cegetista ocurre el mismo día que se publicó un sondeo de Gallup Argentina según el cual 82 por ciento de los argentinos quiere que en los próximos comicios de 2003 se renueve la totalidad de los cargos políticos nacionales, provinciales y municipales. Un 58 por ciento incluso estima que "un cambio total" de la dirigencia política permitiría superar la grave crisis.
En este contexto, las principales empresas locales adelantaron que la semana próxima será lanzada oficialmente la Asociación Empresaria Argentina, para unir a las 50 compañías más importantes del país.
"La intención del grupo es llenar un vacío ideológico que hoy por hoy nos está destruyendo", sostuvo una fuente de una de las empresas, que pidió permanecer en el anonimato. En la lista de empresas estarían el gigante energético Perez Companc, la acerera Acindar y el grupo industrial Techint.