Al designar a un neoliberal, el presidente Duhalde buscaría obtener apoyo del FMI
Lavagna sería el nuevo ministro de Economía de Argentina
AFP, REUTERS Y DPA
Buenos Aires, 25 de abril. En un nuevo gesto hacia el Fondo Monetario Internacional (FMI), el presidente Eduardo Duhalde habría designado ministro de Economía a un defensor del libre mercado, Roberto Lavagna, luego de asegurarse un respiro con una ley que busca detener temporalmente la salida de depósitos congelados por amparos judiciales.
Pero las protestas sociales ante la peor crisis económica que atraviesa el país continuaron este día, con cortes de ruta en varios puntos y marchas en la provincia de San Juan, que quedó totalmente paralizada mientras miles de desempleados organizados, militantes de izquierda y vecinos de algunas asambleas barriales marcharon hacia la Plaza de Mayo, frente a la casa de gobierno, en repudio a Duhalde y al FMI.
Mientras tanto, el feriado cambiario y bancario mantiene sin efectivo a los argentinos, que en muchos comercios tampoco pueden usar sus tarjetas de débito o crédito para compras básicas. "Tengo unos 15 pesos (poco más de cuatro dólares) que me tienen que durar hasta fin de mes, porque no puedo sacar mi dinero y me cortan el gas el lunes. Estamos todos atrapados", dijo a Reuters María Elena, una empleada judicial. Mañana viernes cesará el feriado bancario, pero continuará el cambiario.
Dos fuentes del gobierno dijeron hoy a la prensa que Lavagna, quien también fue embajador ante la Unión Europea, será designado titular de Hacienda. El presidente había respondido poco antes con la escueta pero contundente frase: "me gusta ese ministro", al ser consultado por la prensa sobre si ofrecería la cartera a Lavagna. El futuro funcionario, quien estudió en Harvard, fue embajador ante la Unión Europea y ante la Organización Mundial de Comercio.
Lavagna remplazaría a Jorge Remes Lenicov, quien renunció el martes al estallar una crisis cuando el Congreso no debatió su plan de cambiar todos los plazos fijos y cajas de ahorro por bonos del Estado. Duhalde logró sortear parcialmente la situación con la firma de un compromiso entre los gobernadores para reducir el gasto fiscal, una de las exigencias del FMI.
El mandatario también logró que el Congreso sancionara de urgencia una ley por la cual sólo se pueden recuperar mediante amparos judiciales los ahorros que tengan una sentencia en firme, es decir, cuando tras las apelaciones se llega a la Corte Suprema, lo que demoraría al menos varios meses la devolución de depósitos en este tipo de situaciones.
El pacto con los gobernadores fue recibido favorablemente el jueves por el secretario estadunidense del Tesoro, Paul O'Neill, pero el organismo financiero, que ha redoblado sus exigencias con el país que fuera su alumno más aplicado en la pasada década, continuaba hoy en silencio.
Aunque Duhalde dio otras señales al FMI, como reafirmar su compromiso para anular una ley que permite juzgar delitos económicos, en el marco de la cual se procesa a banqueros culpables de la colosal fuga de depósitos, se inclinaría por abandonar temporalmente el sistema de cambio libre que exigió el FMI y que ha resultado en la pérdida de más de 70 por ciento del valor de la moneda nacional y en presiones inflacionarias que hacen más penosa la grave crisis.
Al hablar sobre las negociaciones con el FMI, Duhalde criticó hoy que "en un momento nos pidieron que despidiéramos a 400 mil empleados públicos". Argentina tiene 22 por ciento de desocupación reconocida oficialmente y atraviesa su mes 46 de recesión.
Según una importante fuente gubernamental citada por Afp, el gobierno impondrá durante 90 días un tipo de cambio anclado para volver después a una flotación administrada o controlada. Pero también dijeron que el gobierno intentará de nuevo buscar consenso para su plan de entrega de bonos en lugar de ahorros.
Por otro lado, Domingo Cavallo, ex ministro de Economía, se quejó ante un magistrado federal de que legisladores y jueces lo someten al "escarnio", al declarar en la causa sobre el canje de deuda que realizó el año pasado. Cavallo, quien portaba un chaleco antibalas, admitió que Argentina pagó "tasas altísimas" por la operación.