Antes de su gira por Medio Oriente pidió
a Arafat controlar a extremistas
EU no pidió a Israel salir de Cisjordania, sólo
"iniciar el repliegue", aclara Colin Powell
Denuncia Palestina falta de presiones reales para que
Tel Aviv abandone zonas ocupadas
AFP, DPA Y REUTERS
Washington, 7 de abril. Horas antes de iniciar
su gira por Medio Oriente, el secretario de Estado estadunidense, Colin
Powell, llamó hoy al líder palestino Yasser Arafat a "controlar"
a los extremistas palestinos, al tiempo que negó que Washington
hubiera impuesto un ultimátum a Israel para retirarse de Cisjordania.
Lo que el presidente George W. Bush pidió al primer
ministro israelí Ariel Sharon fue "comenzar el proceso de repliegue
y que lo haga ahora", aclaró Powell.
Señaló
que pese a que Washington comprende que Israel actúa en defensa
propia con su ofensiva militar, Sharon tiene que ser "de alguna manera
consciente de las consecuencias de esta acción".
Demasiada fuerza militar contra un pueblo que carece de
suministros de alimentos, energía y agua "podría tener otras
consecuencias", consideró.
De todos modos, "estoy satisfecho de escuchar al primer
ministro decir que va a poner fin rápidamente" a las operaciones
israelíes, agregó el funcionario, quien dijo haber conversado
este domingo con Sharon.
Sin embargo, al comentar el llamado de Bush al retiro
israelí, Sharon sostuvo que "una de nuestras prioridades es conservar
relaciones con nuestros amigos, sobre todo con Estados Unidos. Pero es
cierto que a veces puede haber desacuerdos". "Si esos desacuerdos se producen
serán desacuerdos entre amigos", agregó el primer ministro,
quien la víspera ordenó la continuación de los ataques
israelíes a las localidades palestinas.
La consejera del presidente para la seguridad nacional,
Condoleezza Rice, declaró por su lado a la cadena de televisión
CBS que el mensaje de Estados Unidos era "muy claro": el retiro israelí
"debe comenzar sin demora, ahora, no mañana".
Pero también matizó este mensaje al subrayar
que "comprendemos que una operación militar de esta importancia
no puede detenerse en un instante". "Esto no se hará en un día",
coincidió Powell.
A su vez, el ministro israelí de Defensa, Benjamin
Ben Eliezer, dijo que cuando Bush pidió el retiro "sin demora" de
las ciudades palestinas ocupadas no quiso decir que las fuerzas israelíes
debían retirarse "inmediatamente".
La dirección palestina, de su lado, denunció
en un comunicado la falta de presiones reales estadunidenses a Israel para
que retire sus fuerzas de las zonas reocupadas, lo que da a Sharon "luz
verde para comenter nuevos crímenes de guerra".
Por otro lado, Powell consideró que Yasser Arafat
"debe demostrar capacidad de liderazgo, debe hacer todo lo que esté
en su poder, y el poder aún está allí, aunque limitado,
para controlar los excesos y ayudarnos a salir de esta crisis". El líder
palestino se encuentra sitiado en su destruido cuartel general de Ramallah
por el ejército israelí.
"No sé si es su última oportunidad. Quizás
ya no tenga oportunidades", apuntó el secretario de Estado, quien
dijo que todavía no está decidido si se reunirá con
Arafat durante su gira, y apuntó que en todo caso lo hará
"si las circunstancias lo permiten".
Los cancilleres de la Liga Arabe insistieron ayer en que
ningún otro palestino tiene derecho de reunirse con Powell en lugar
de Arafat, pero Condoleezza Rice sostuvo hoy que su país busca otro
interlocutor, porque "los palestinos merecen un mejor liderazgo".
También en relación con Arafat, Eliezer
declaró que Israel "no tenía la intención de expulsarlo,
y que sólo trataba de "aislarlo", asegurando al mismo tiempo que
la única finalidad de Israel es sentarse en la mesa de negociaciones.
En relación a si Arafat estaría allí, contestó
que "si se comporta com un dirigente del terror no tendrá un lugar".
En este contexto, el jefe de Estado ruso, Vladimir Putin,
se declaró este domingo contrario "a la exclusión de la escena
política" de Arafat, porque esto provocaría "un radicalismo
de ciertas fuerzas en el mundo árabe".
Colin Powell destacó que el objetivo de su misión
en Medio Oriente es alcanzar un cese del fuego entre israelíes y
palestinos. "Si se reduce la violencia, si comenzados a establecer nuevamente
un diálogo entre ambas partes, entonces la energía que estoy
dispuesto a invertir en este viaje será recompensada", sostuvo.
El secretario de Estado ?quien partió esta noche
hacia Marruecos, antes de ir a El Cairo, luego a Madrid, y llegará
a Jerusalén el jueves? destacó además que "lo que
nos preocupa es que estamos perdiendo una parte del apoyo que teníamos
en el mundo árabe, en Egipto, en Jordania, en Arabia Saudita".