Responsabiliza a grupo de interés priísta de frenar la iniciativa en el Senado
Critica Ortiz Pinchetti la desidia y falta de compromiso de Creel en la reforma
Señala directamente al legislador David Jiménez Guzmán de emplear tácticas dilatorias
Pide al presidente Fox, al secretario de Gobernación y al PAN que se definan sobre el tema
ELIA BALTAZAR
El priísta David Jiménez Guzmán, presidente de la Comisión del Distrito Federal de la Cámara de Senadores, es el "responsable de la parálisis" parlamentaria en que se encuentra atrapada la reforma política de la ciudad de México. Pero él no actúa solo. "Suponemos" que hay una fracción del PRI que está demorando la discusión y la inclusión de la reforma en la agenda del Senado, para impedir su aprobación mediante "tácticas dilatorias".
Es el secretario de Gobierno del Distrito Federal, José Agustín Ortiz Pinchetti, quien advierte sobre la resistencia de algunos senadores para abordar seriamente la reforma política del DF. Y censura la falta de entusiasmo y compromiso en el tema que recientemente han mostrado el gobierno federal -particularmente el titular de Gobernación, Santiago Creel- y algunos sectores del PAN. "No puedo creer que ahora, de pronto y sin explicación, palidezca el entusiasmo que mostraron en las etapas previas."
Rehén de negociaciones
Frente a la falta de razones y de una explicación pública por parte del Senado para detener la reforma política del DF, surgen los rumores. "Hay quienes dicen que el DF y su reforma son rehenes de una serie de negociaciones políticas que no conocemos. No alcanzamos a observar qué motivos están tan fuertemente vinculados al tema de la reforma que puedan provocar esta parálisis. Digamos -agrega- que se está actuando con una motivación que no se ha hecho explícita."
Las hipótesis, sin embargo, se dirigen todas en un solo sentido: el PRI. Y así lo expresa Ortiz Pinchetti: "Se rumora que hay diferencias entre los legisladores de ese partido, que algunos priístas no piensan como otros de sus correligionarios en torno de la reforma, que su proceso electoral interno ha perjudicado. Pero todos son motivos que nada tienen que ver con el fondo de la reforma".
El resultado de todo este entramado de negociaciones políticas entre partidos o entre órganos legislativos es uno: a la fecha, cuando ya se inició hoy el periodo ordinario de sesiones en el Senado, no hay dictamen ni borrador de la reforma y todavía se pretende realizar foros de consulta para posponer la discusión y poner en riesgo su aprobación, advierte Ortiz Pinchetti.
"Hasta hoy -dice- no se ha hecho público ningún tipo de observaciones. Ni siquiera hemos entrado a plantear el problema con seriedad. He platicado con muchos senadores y nos han pedido que les enviemos algún memorándum, que quieren conocer a fondo la iniciativa. Y eso me hace suponer incluso que la reforma todavía no ha sido circulada en el Senado."
-ƑQuién es el responsable de esta parálisis que ha hecho presa a la reforma política?
-La responsabilidad recae en la Comisión del Distrito Federal del Senado, que preside el priísta David Jiménez. He tenido siete conversaciones con él y nunca me ha expresado las reservas específicas, digamos de tipo conceptual sobre el texto de la reforma. Me ha dicho, por ejemplo, que los senadores están un poco molestos porque la cámara de origen de la iniciativa fue la de Diputados y no la de Senadores. Pero esto siempre ocurre en el caso de las reformas para el Distrito Federal.
Han argumentado también, dice Ortiz Pinchetti, que les preocupa el tema de la coordinación metropolitana, según lo expresó el senador priísta y ex gobernador del estado de México César Camacho. "Pero se acordó con la ALDF que ese tema todos los partidos se comprometieron a impulsarlo. Nada más que por cuerdas separadas. Porque una cosa es el Distrito Federal y otra la zona metropolitana. No hay motivo de discusión al respecto".
Pero de la resistencia en el Senado ante la reforma política no sólo es responsable David Jiménez, pues "supongo que él no está actuando por su propia voluntad. No es él quien está metiendo en un cajón la reforma porque así lo quiera". Aparentemente hay detrás de esta "apatía programada", dice Ortiz Pinchetti, una fracción del PRI, un grupo que está demorando las cosas y que ya anuncia incluso la realización de foros de consulta.
"Eso suena a dilación, a una táctica dilatoria para que no se incluya el tema de la reforma en este periodo y llevarla a uno próximo o al siguiente, en el que habrá otras consultas que finalmente impedirán que salga la reforma política del DF."
Aunque Ortiz Pinchetti concede que los nuevos tiempos políticos obligan a los senadores a preocuparse más de los temas y hacer reflexiones más profundas, "no se vale detener los procesos parlamentarios porque se viola la ley, se viola el espíritu de la ley y se obstaculiza el proceso democrático".
Otros responsables
Si bien el Senado de la República tiene en este momento bajo su responsabilidad el proceso de aprobación de la reforma política del DF, para que su discusión transite luego hacia los congresos locales, el secretario de Gobierno del DF no absuelve de su obligación frente al tema al secretario de Gobernación, Santiago Creel; al presidente Vicente Fox y a un sector del PAN.
-ƑQué papel pueden desempeñar estas partes en esta etapa de la reforma política?
-Si el secretario de Gobernación y el PAN iniciaran una ofensiva diplomática seria a favor de la reforma, sería imposible detenerla. Sobre todo porque hay un enorme apoyo del PRD y de un sector del PRI, en el que se encuentran María de los Angeles Moreno (coordinadora de la fracción del tricolor en la ALDF), el senador Salvador Rocha y los diputados federales. Con su impulso se eliminarían los obstáculos y las cosas avanzarían una vez que el Presidente, Creel y el PAN tuvieran un posicionamiento fuerte y claro respecto de la reforma para el DF.
Ortiz Pinchetti recuerda, además, que en su momento Santiago Creel tomó como bandera política la reforma del DF. "Su carrera política comenzó en el plebiscito de 1993, luchando por las cosas que queremos ahora ver con la reforma. Su participación fue muy activa en las primeras etapas, aunque ahora hay muestras de atonía, como si hubiera una actitud más bien apática del gobierno federal y hasta del PAN, que durante 35 años propuso llevar adelante este reforma".
Aunque Ortiz Pinchetti advierte que "hasta ahora la presión que el PAN podría ejercer sobre la Comisión del DF del Senado no se ha manifestado, al menos públicamente", confía en un cambio de actitud del gobierno federal y del PAN mismo. "Esperamos que ahora que están en el poder Creel y el Presidente tengan ese entusiasmo que demostraron en la etapa previa de la reforma, antes de ganar el gobierno."
El funcionario capitalino concluye con una reflexión: "La irresponsabilidad, la frivolidad y la mezquindad no se justifican ante los momentos coyunturales. Hay que aprovechar la oportunidad que la reforma política del DF nos abre, porque las coyunturas desaparecen y las cosas se tornan más difíciles".