Israel aportó información para bombardeos
Viernes 28 de marzo de 2025, p. 21
Washington. El juez James Boasberg ordenó ayer a funcionarios del gabinete de Donald Trump involucrados en el chat grupal sobre los planes de ataques militares a Yemen que conserven todas las comunicaciones de Signal de entre el 11 y el 15 de marzo
, a las cuales se añadió por error al periodista Jeffrey Goldberg, redactor jefe de la revista The Atlantic.
Más tarde trascendió que Israel proporcionó información de inteligencia sobre los ataques aéreos discutido en Signal, afirmaron funcionarios estadunidenses citados por el diario The Washington Post.
El caso fue presentado por la organización no gubernamental American Oversight, que aboga por una mayor transparencia en los asuntos públicos.
Antes, los senadores Roger Wicker, republicano, y Jack Reed, el demócrata de mayor nivel en el Comité de Servicios Armados del Senado, solicitaron una investigación sobre cómo los funcionarios de seguridad nacional utilizaron la aplicación Signal para intercambiar información de ataques militares, lo que garantizaría al menos un escrutinio bipartidista sobre un episodio que Trump ha desestimado como irrelevante.
En una carta, Wicker y Reed pidieron al inspector general del Pentágono llevar a cabo una investigación” sobre esta violación de seguridad.
La revista The Atlantic publicó casi toda la conversación del grupo, al que fue incorporado por descuido el periodista Jeffrey Goldberg.
El asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz, lo añadió al grupo de debate integrado, entre otros, por el secretario de Defensa, Pete Hegseth; el vicepresidente J. D. Vance y jefes de la Agencia Central de Inteligencia, entre otros.
La oposición demócrata alega que se podría haber puesto en peligro la vida de soldados estadunidenses y pidió la dimisión del también jefe del Pentágono por haber comunicado los detalles de un ataque previsto en Yemen.
Para el presidente Donald Trump se trata de una cacería de brujas
, según publicó en su cuenta de la red social X. El miércoles declaró a periodistas que no le preocupaba la posibilidad de una investigación en el Congreso.
En su carta, los senadores Wicker y Reed pidieron al inspector general investigar los hechos y circunstancias
de la falla de seguridad. De ser cierto, este artículo plantea dudas sobre el uso de redes no seguras para discutir información confidencial y secreta de defensa
, añadieron.
El miércoles Wicker consideró que la información compartida debería haber sido clasificada, pero la Casa Blanca no lo cree así.
Wicker también dijo que el comité solicitará una audiencia privada con un alto funcionario de la administración de Trump y que el gobierno verifique el contenido del chat de Signal publicado por The Atlantic.
Los contenidos muestran que el secretario de Defensa, Pete Hegseth, mencionó sistemas de armas y un cronograma para el ataque a los rebeldes hutíes respaldados por Irán en Yemen a principios de mes.
Nunca hemos negado que fuera un error
, repitió la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Waltz reconoció públicamente su responsabilidad por añadir a Goldberg al chat.
La fiscal general Pam Bondi estimó ayer que hay pocas posibilidades de que se abra una investigación penal sobre esta violación de seguridad. Era información delicada, pero no clasificada, y fue revelada por error
, señaló luego de alabar el éxito de los ataques estadunidenses contra los hutíes, llevados a cabo el 15 de marzo.
En tanto, The Washington Post afirmó que Israel proporcionó información delicada que aportó una fuente en Yemen sobre una operación militar hutí clave, que fue blanco de un ataque descrito por Waltz en el chat de Signal.
Poco después de comenzar los ataques estadunidenses, Waltz envió un mensaje de texto diciendo que un blanco de los ataques, un experto en misiles hutíes, fue visto entrando al edificio donde vivía su novia, que según él fue destruido.
Los funcionarios israelíes se quejaron con sus pares estadunidenses de que los textos de Waltz se hicieran públicos, añadió el Post.