La política migratoria del presidente Donald Trump, que se centra en deportaciones y aumento de restricciones en el acceso al asilo, ha incrementado los riesgos para las personas en movilidad, ya que toman otras rutas y modalidades para intentar de llegar a Estados Unidos, planteó Estefani Beltrán del Río, coordinadora de protección en el Comité Internacional de Rescate México (IRC). Una evaluación del IRC (2025) arrojó que 50 por ciento de los indocumentados sufrieron extorsiones, robos y violencia de género, comentó.

El estudio de casos realizado después del comienzo de la administración del republicano evidenció también que 26 por ciento fueron secuestrados al menos una vez en el país, como en Durango, Chihuahua, Ciudad Juárez y Matamoros, entre otras zonas, y destacó lo difícil que es reconocer esta experiencia traumática y de riesgo, que no sólo sucede una vez durante la ruta. En sus testimonios dicen que México ha sido el más difícil en su trayecto migratorio, incluso más que cruzar el Darién.

En el Foro Internacional: Movilidad Humana y Seguridad Social, organizado por la Conferencia Interamericana de Seguridad Social y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, dijo que todas esas situaciones se agravan por la desinformación o la información no verificada” y la complejidad de las políticas migratorias, así como las actividades de redes de contrabando que se benefician del engaño, lo que sitúa a las personas en gran vulnerabilidad.

Especificó que los datos están basados en historias de vida, mujeres que tienen un nombre, un rostro y que han buscado los servicios de apoyo de la organización (IRC) en Ciudad Juárez, Chihuahua.