El aumento en el consumo de drogas y la existencia de suficientes instituciones para atender a la población que cae en la adicción en la Ciudad de México, así como para el cuidado de la salud mental, son factores que contribuyen a la proliferación de clínicas clandestinas, aseguró la investigadora de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Cristina Pérez Agüero.

Los niveles de consumo han ido en aumento y radica en que este tipo de establecimientos se incrementen, (porque) atender la salud mental muchas veces si no es de élite, es de gente que alcance ficha o tenga acceso para recibir atención en el hospital siquiátrico Fray Bernardino Álvarez y el infantil Juan N. Navarro, en Tlalpan, que también atienden a pacientes foráneos.

Explicó que el problema de las adicciones traspasa lo médico y sicológico a lo que se suma que la edad de inicio en el consumo es más temprana, lo que explica que la campaña de prevención de adicciones alerten a la población sobre el consumo de drogas y uso de vapeadores.

“Estas clínicas que antes se les denominaba granjas o lugares de internamiento de cuarto o quinto paso no tienen una regulación específica”; además, a “quien engancha es a la familia –más que a la persona que tiene alguna adicción–, que ante la desesperación autoriza el internamiento sin investigar el tipo de tratamiento que ofrecen, en algunos casos es a través del castigo y los malos tratos como se busca que la adicción desaparezca.”

Según reportes de los Centros de Integración Juvenil de 2023, que difundió el lunes pasado el Ejecutivo federal, la droga que más se consume en el país es la metanfetamina, por arriba de la mariguana; siguen el alcohol, el tabaco, la cocaína y el crack, cuyas cifras están por debajo de la situación que presenta Estados Unidos.

De acuerdo con el testimonio de un joven que acude a un centro autorizado por el Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones, la mayoría de los asistentes acuden por problemas con drogas como el crystal, la piedra y solventes, así como por alcohol.