En el criadero de truchas rancho La Rosita, ubicado en el tercer dinamo de La Magdalena Contreras, Cándido Estrada López logra la reproducción controlada de alrededor de 100 mil truchas al año, que comercializa entre pequeños productores de Cuajimalpa, Milpa Alta, Xochimilco y Tláhuac, con lo que promueve la economía local y el autoconsumo.

A sus 62 años, Estrada López recuerda que desde los ocho años su afición por pescar lo llevó a plantearse el reto de tener su propia granja en medio de oyameles y encinos, que finalmente logró con el respaldo de su padre, dedicado a la siembra y al cultivo de árboles frutales.

La calidad de las truchas, de color oro viejo y cuyo tamaño promedio para el consumo es de 250 gramos, es también motivo de atracción del turismo nacional e internacional que visita el restaurante La Trucha Loca y su Sazón, al que han acudido personas provenientes de Malasia, India, Corea, China, Japón, Italia y Argentina, por mencionar algunos.

En un recorrido convocado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, que considera a la especie acuícola como una buena opción para consumir durante la cuaresma, Bibiana Maricleine Estrada, hija de don Cándido, relató que el hombre es el primer pescador con registro en la Ciudad de México del siglo pasado, que siempre busca innovar, pero también transmitir conocimientos.

Adversidades como la contaminación del agua que ocurrió el año pasado por heces fecales de ganado o perros, que llevó a la muerte de varios peces, así como una tromba de hace más de dos décadas que destrozó el criadero, no minaron el ánimo de don Cándido, por el contrario, mejoró los 11 tanques con que cuenta, además se hizo llegar de tecnología como paneles solares e Internet satelital para mantener comunicado a los clientes del restaurante.

Desde enero acuden al paraje La Rosita, donde se ubica el rancho, Bryan, Arat, Andrea, y Fátima, quienes forman parte del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, perteneciente a la Secretaría de Trabajo y Previsión Social del gobierno federal.

Fátima, joven egresada del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario número 35, en La Magdalena Contreras, dijo que trabajar en el criadero y el restaurante es una oportunidad para encontrar un empleo en los meses por venir, aprender reglas y trabajar en equipo.

En la actualidad el criadero cuenta con 40 mil truchas que se mantienen en aguas del río perenne Las Ventanas, que es un brazo del río de La Magdalena Contreras, que se compone de 66 manantiales en 19 kilómetros a cielo abierto.

Don Cándido mencionó que la producción en el criadero es suficiente por el momento, por lo que lanzó el llamado a la Secretaría de Agricultura y a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca: pónganse a chambear para que den a conocer el pez, que digan cuáles son los nutrientes y beneficios de consumir el producto.